Alexis Massieu
Un fallido intento por recuperar de las manos de su propio hermano, más de 16 mil metros cuadrados de terreno a un costado de la carretera federal 57 en Castaños, hizo Cristian Alvino “N”, el día de ayer, con base a una denuncia penal por despojo respecto de la cual solicitó a un juez, que ordenara la restitución de un bien mueble, del que asegura tiene las escrituras.
Fue a las 13:00 horas en el Centro de Justicia Penal, cuando se celebró una audiencia de control de garantías, cuya finalidad era la de convencer a un juez de que dictara las medidas oportunas para que a Cristian Alvino “N”, le fuera devuelta la posesión de 183 hectáreas, que actualmente está ocupando José Alfonso “N”.
El abogado de quien denunció ser víctima de despojo ante la Fiscalía General del Estado, expuso que fue el 7 de junio del 2022, entre las 20:00 y las 20:40 horas, que se llevó a cabo el despojo de dos terrenos, uno de 11 mil 960 metros cuadrados, y otro de 5 mil, llegando varias personas a bordo de diversos vehículos, y en compañía de una patrulla de la Policía Municipal, cuyos agentes detuvieron al velador en la creencia de que no tenía autorización del dueño para estar ahí.
Para demostrar que Cristian Alvino es el dueño de las dos propiedades, y que tenía la posesión de los mismos hasta antes del 7 de junio por la noche, su abogado Jesús Uresti, aportó una serie de datos de prueba, entre los que destacan: dos escrituras que fueron inscritas en el registro público de la propiedad, y 2 cartas de no gravamen, y los comprobantes de pago del predial.
Javier Liñán, abogado del acusado, indicó que pese a ostentar un título registrado a favor del denunciante, existían vicios en la manera en que los propietarios originales, que es el Ejido Castaños, se hicieron con los dos terrenos en disputa, que formaban parte de una extensión de 183 mil metros cuadrados, mediante un procedimiento realizado de forma indebida ante un notario.
El juez penal, tras escuchar a los abogados de ambas partes, resolvió que la petición de restituir a uno de las propiedades, privando al otro de las mismas era notoriamente improcedente, ya que, pese a que hay una carpeta de investigación iniciada con motivo del delito de despojo ante el Ministerio Público, aún no está demostrado que el delito se haya cometido, dado que ni siquiera se ha comenzado con el proceso; y quien es señalado tiene derecho a ser escuchado y vencido en juicio.