El efecto «Tuca» se hizo presente en el Estadio Azteca para que Cruz Azul consiguiera su segunda victoria del torneo al vencer 1-0 a Atlas.
Contagiados por el buen ánimo con el que los aficionados celestes tomaron la llegada a la dirección técnica de Ricardo Ferretti, los jugadores de la Máquina buscaron por todos los medios el gol del triunfo, el cual llegó a 13 minutos del final.
Si bien los Rojinegros se plantaron atrás con dos líneas de cuatro y esperaron a Cruz Azul, el técnico interino de los Cementeros, Joaquín Moreno, movió sus piezas e hizo entrar a Agusto Lotti y Rodrigo Huecas, quienes fueron vitales para la ofensiva local.
Fue al minuto 77 cuando el joven canterano de la Máquina metió un centro por izquierda, el cual fue rematado y enviado al fondo de las redes por el delantero argentino, quien también se estrenó como goleador de Cruz Azul.
El gol se le había negado a los Celestes durante gran parte de la primera mitad, pues los locales salieron con todas las ganas de obtener la victoria.
Primero por conducto de Alonso Escoboza, con un remate de cabeza que pasó tan cerca de del marco de Camilo Vargas que hasta el encargado de los fuegos artificiales en el Coloso de Santa Ursula se fue con la finta y los activó creyendo que había sido gol.
Otro que tuvo la gloria en sus pies fue Ramiro Carrera, quien solo en los linderos del área mandó su disparo lejos del segundo poste de la meta de Atlas, ahogando el festejo de los más de 39 mil aficionados que asistieron al encuentro.
Cruz Azul llegó a 7 puntos en el torneo, mientras que Atlas se quedó con la misma cantidad de unidades.