Por Antonio Zamora
Hoy empezaremos con una frase que aseguran pertenece a un ganador del Nobel de Medicina, aunque quien lo envió no nos dice el nombre del citado personaje…
Cierto o no, el mensaje cae al dedillo a la época actual, aunque, claro, usted podría no estar de acuerdo…
“En el mundo se está invirtiendo más en medicamentos para la virilidad masculina y silicona para mujeres que en la cura del Alzheimer…
Dicen que hay muchas mentiras, pero cuáles son las mentiras más grandes de la historia, dos y aparte:
“Estoy bien”.-
Cuando la respuesta debe de ser. No estoy bien, ayúdame por favor…
“Estoy un poco cansado”
Cuando debe ser ya no aguantó más…
“Lárgate”
Debe ser muéstrame que te importo lo suficiente para quedarte…
“Simplemente, soy frío”
No quiero que veas mis heridas…
“Ya comí”
Muero de hambre, pero no quiero engordar , invariablemente debe ser la respuesta al no tengo hambre o ya comí…
Por otro lado, siempre habrá un te lo dije en la boca de alguien y un tal vez en la boca de todos…
Pero también nunca esperes de nada de nadie, es preferible estar sorprendido que decepcionado…
Y muchos se siente así: querida vida, cuando pregunto si mi vida no puede ponerse peor, es una pregunta retórica, no un desafío…
Cierto día, un profesor entró al salón de clases y les dijo a los alumnos que se prepararan para un examen relámpago…
Todos se ubicaron en sus asientos aguardando asustados la prueba que venía…
Entonces el profesor fue entregando las pruebas con el texto para abajo, como era la costumbre cuando había exámenes…
Después que todos recibieron la hoja con el cuestionamiento, el mentor pidió a los muchachos voltearan la hoja…
Para sorpresa de todos, no había ninguna pregunta o escrito, solamente un punto negro al centro de la hoja…
El profesor, viendo la expresión de sorpresa que todos tenían, dijo lo siguiente, dos puntos y aparte:
Ahora, ustedes van a escribir un comentario sobre lo que están viendo…
Todos los alumnos, confundidos comenzaron entonces, la terrible e inexplicable tarea del examen…
Terminado el tiempo, el profesor recogió las hojas, se puso frente al grupo y comenzó a leer las redacciones una a una en voz alta…
Todas, sin excepción, definían el punto negro intentando dar explicaciones por su presencia al centro de la hoja…
Terminada la lectura, con la sala en silencio, el maestro comenzó a explicar, otros dos y aparte:
Esta prueba no será para la nota, solamente sirve de lección para todos…
Nadie en la sala habló sobre la hoja en blanco. Todos centraron su atención en el punto negro…
Eso acontece en nuestras vidas. Tenemos una hoja en blanco entera para observar y aprovechar pero siempre nos centramos en los puntos negros…
La vida es un regalo que Dios nos dio a cada uno de nosotros con mucho cariño y cuidado, dijo el profesor…
¡Siempre tenemos motivos para celebrar!
La naturaleza que se renueva, los amigos que se hacen presentes, empleo que nos da sustento, los milagros que presenciamos cada día…
Sin embargo insistimos en fijarnos solo en las manchas negras…
El problema de salud que nos preocupa, la falta de dinero, la relación difícil con un familiar, la decepción con un amigo…
Los puntos negros son mínimos en comparación con todo aquello que tenemos diariamente, más son los puntos negros los que pueblan nuestra mente…
Quita los ojos de los puntos negros de tu vida. Tranquilízate. Sé siempre feliz y vive con amor…
NOS LEEMOS MAÑANA…