Alberto Rojas Carrizales
Saúl Martínez Sánchez, el trabajador de Altos Hornos de México que desde las 11:00 horas del miércoles se declaró en huelga de hambre, describió el drama de medio año de crisis y peticiones de ayuda a familiares que ya también se declaran insolventes para respaldarlos en esta situación de emergencia. Agregó que, en casa, ya no hay nada que vender porque todo lo han rematado.
Dijo que sus familiares les dicen fríamente; “en esta ocasión no te podré ayudar, carnal, o te doy a ti o a mi familia- así nos dicen, pero se comprende- señaló el obrero del departamento Laminadora en Caliente de la Siderúrgica 1 de Altos Hornos de México que este viernes antes del mediodía llega a 48 horas sin probar bocado en medio de la solidaridad incondicional de los trabajadores.
“He vendido sierras, taladros, rotomartillo, equipo de máquina de soldar, actualmente la gente no tiene miedo, lo que queremos en un momento dado es la liquidación, a trabajar estamos dispuestos a ponernos la playera”, expresó.
Martínez, se alimenta moralmente del gran respaldo de trabajadores, empleados, vecinos, amistades, y familiares, que lo visitan diariamente en el sitio denominado área del Ave Fénix, y advierte, que ahí continuará. La protesta social es porque AHMSA adeuda siete semanas de salario y todas las prestaciones contractuales, incluyendo el premio por asistencia.
“Suman siete semanas sin salario, además del ahorro, más que el deben pagarnos en la segunda semana de julio, esta crisis que nos afecta ya tocó fondo, le decimos a la empresa, que, si no tienen solución que la busquen”, agregó el obrero.
Expresó el entrevistado que el problema de reencontrarse con una fuente de empleo para los mayores de 50 años, es que precisamente por la edad enfrentan dificultades paras ser aceptados en alguna empresa a diferencia de los jóvenes.