Especial
Con la intención de recuperar el sueldo para él y cerca de 17 mil empleados de Altos Hornos en Monclova y otros municipios de Coahuila, Saúl Martínez Sánchez inició una huelga de hambre que prolongó por casi 9 días hasta que su salud se vio afectada el pasado jueves.
Empleado por 36 años en el área de Laminado en Caliente, el hombre de 54 años llegó a la conclusión de que no habrá un pago justo para proveedores y empleados porque buscan llevar a la empresa a la quiebra.
“Quise iniciar una lucha obrera, una lucha transparente, quise abrirle los ojos a todos mis compañeros, ya que nos han tenido con los ojos vendados”, manifestó.
“La empresa busca la quiebra para no pagar a nadie, porque son miles de millones los que se deben”.
Durante casi nueve días, Martínez Sánchez acampó frente al Ave Fénix, una escultura ubicada en el cruce del Bulevar Harold R. Pape y Avenida Industrial, donde se encuentran la planta 1 de Altos Hornos y las oficinas corporativas.
“Lo pensamos, lo analicé con mi familia, es una desesperación muy grande, de no tener qué comer, pero tenemos que luchar para lograr que nos pague todo”, indicó.