20Minutos. A partir de ahora, las mujeres en Estados Unidos podrán obtener una píldora anticonceptiva sin necesidad de prescripción médica. Se llama ‘Opill’ y ha recibido este jueves la luz verde de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA): autoriza la venta sin receta de la píldora diaria, aunque su comercialización no se iniciará hasta principios de 2024.
Parafarmacias, tiendas de alimentación, e incluso comercios en internet podrán poner a la venta este medicamento, que a su vez podrá ser adquirido tanto por mujeres adultas como por adolescentes. En efecto, esta pastilla no tendrá restricción de venta por edad.
No es la que se conoce como ‘la píldora del día después’ -su compra sin receta ya estaba permitida en el país americano-. Se trata de la píldora diaria que se toma todos los días para prevenir el embarazo. También llamado norgestrel, esta píldora está basada en hormonas y es la forma más común de control de la natalidad en Estados Unidos.
Hasta ahora, se exigía una receta médica para su adquisición, pero algunos colectivos denunciaban que la privatización de la atención médica en este país dificultaba el acceso de muchas mujeres a este anticonceptivo. De hecho, la FDA recuerda el en torno al 45% de los más de 6 millones de embarazos de EE UU cada año no son deseados.
«Será una opción disponible para millones de personas en los Estados Unidos», apunta Patrizia Cavazzoni, médica y directora del Centro de Evaluación e Investigación de Medicamentos de la FDA. Además, la doctora del centro incidía en que «cuando se usa según las indicaciones, la anticoncepción oral diaria es segura y se espera que sea más eficaz que los métodos anticonceptivos sin receta actualmente disponibles para prevenir embarazos no deseados».
La píldora en España
Al igual que en EE UU, en España la ‘píldora del día después’ se puede comprar en la farmacia sin receta. Concretamente desde finales de septiembre de 2009, esta se puede dispensar en las oficinas de farmacia, teniendo el personal de farmacia la obligación de proporcionar la información necesaria sobre el uso correcto de este medicamento a la mujer que la requiera.
Sin embargo, el debate en nuestro país gira en torno a la pastilla diaria, cuya obtención sin receta está prohibida. Es decir, a diferencia de Estados Unidos -por esta nueva aprobación-, en España se sigue necesitando receta médica para obtenerla.
Organizaciones como la Sefac, la Semergen y la SEMG defienden que este tipo de anticonceptivo oral de uso regular tiene un alto perfil de seguridad dado que incluso las mujeres que están dando el pecho a sus hijos la pueden tomar. Además, sostienen que se debe «eliminar barreras» de acceso, «empoderar a la mujer» y «sumar más puntos de atención» a la salud sexual de las mujeres.
Desde el otro lado, la Sociedad Española de Contracepción (SEC) recalca la necesidad de que los profesionales de la anticoncepción asesoren y ajusten el método que más se adapta al perfil de cada mujer. «Si damos lo mismo a todo el mundo, un porcentaje de mujeres abandonará porque ese no será su método anticonceptivo ideal y eso es una causa importante de embarazos no deseados», contó hace unos meses la portavoz de la SEC, Isabel Pascual Lahoz.