Alberto Rojas Carrizales
Operada desde hace 60 años en Monclova por tres generaciones, la zapatería –Montemayor- afirmó que ahora por la crisis económica que enfrenta un sector de la población que trabaja en Altos Hornos de México, la gente prefiere enviar a reparar su calzado porque no hay presupuesto para adquirirlos nuevos.
Jaime Arturo Montemayor, indicó que el taller de zapatería fue fundado hace aproximadamente 60 años, es decir a inicios de la década de los sesentas por su abuelo Raúl Montemayor, continuando luego con su tío y padre Jesús Raúl, y Mario Alberto Montemayor, una familia que durante seis décadas le ha sacado brillo a la actividad al laborar con dedicación.
Durante más de 60 años la familia Montemayor ha trabajado con su herramienta de desarmadores, cuchillas, pinzas, martillo, lijas, entre otros recursos que aplican según sea el tipo de trabajo que van a realizar con zapatos, botas y botines de varones y féminas en las distintas presentaciones.
-Como en todo negocio, hay altas y bajas en actividad, sin embargo, aún en tiempos de la pandemia, estuvimos laborando normalmente, hay tiempos malos y tiempos buenos, aunque algo afectó, pero siempre hemos salido adelante con el esfuerzo y dedicación que llevamos a cabo a favor de los clientes- añadió Jaime Arturo.
De pronto, enfatizó, hay mucho trabajo, y en otras ocasiones muy poco, pero actualmente sí hay requerimientos de reparación de calzado, y es que algunas personas no tienen dinero para comprar nuevo, y lo traen a reparar.
Afortunadamente, subrayó, -de repente siempre hay trabajo, soy la tercera o cuarta generación porque mi tío también se dedica a esto, a la reparación de calzado, mi abuelo inició el taller, siguieron mi padre, mi tío y ahora yo, habría una cuarta generación, pero mis hijos todavía son pequeños.