Al ser fuente de omega-3, el pescado ayuda a prevenir enfermedades y mejorar la salud del corazón y el cerebro.
El consumo de aceite de pescado puede tener diversos beneficios para salud, por lo que es una buena idea incluirlo en tu dieta en variedades como el salmón, anchoas, sardinas o atún, aunque también en forma líquida o en cápsulas.
Sus efectos positivos son porque es considerada una fuente de ácidos grasos omega-3, que generalmente provienen de los alimentos. Contiene ácido docosahexaenoico (DHA) y ácido eicosapentaenoico (EPA), vitamina A y D, lo que lo hace bueno para cuidar al corazón y al cerebro.
Los beneficios del aceite de pescado
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda comer 2 o más porciones de pescado por semana. De acuerdo con Mayo Clinic, puede tener efectos antiinflamatorios. Combate a los triglicéridos y colesterol altos en la sangre, reduce la presión arterial y previene el riesgo de padecer alguna enfermedad cardiaca.
También se usa en la artritis reumatoide, puesto que ayuda a rebajar el dolor, mejora la rigidez y alivia la sensibilidad en las articulaciones. En la edad adulta favorece la salud ósea cuando los huesos comienzan a romperse, así como padecimientos como la osteoporosis y la osteoartritis.
Sin embargo, una ingesta excesiva puede aumentar el riesgo de sangrado o accidente cerebrovascular. Se enlistan como algunas de sus posibles complicaciones el mal aliento, la acidez estomacal, erupciones, náuseas o diarrea.
Según la American Academy of Ophthalmology es aliado en el ojo seco, que es cuando se vuelve rojo, pica, se irrita o tiene poca lubricación.
Healthline añade algunas otras utilidades, ya que actúa contra las placas que pueden hacer que las arterias se endurezcan y es buena en el embarazo y los primeros años de vida de los bebés al acompañar el crecimiento y luchar con los síntomas del asma y el riesgo de alergia. En los niños con TDAH actúa en la atención y la hiperactividad.
Disminuye la producción de moléculas inflamatorias llamadas citocinas que son relacionadas con la obesidad y el estrés; se le reconoce por ser apoyo en la depresión y reduce posibilidades de trastorno bipolar o esquizofrenia. Favorece la memoria y retrasa el deterioro mental.
Este líquido genera una sana apariencia de la piel contra enfermedades como la psoriasis y la dermatitis, además que es buena para la enfermedad del hígado graso no alcohólico (NAFLD, por sus siglas en inglés) al reducir la grasa del hígado.