Por Wendy Riojas
Este jueves 10 de agosto, Lorenzo Rodríguez Castillo, mejor conocido como el “Tío” cumplió sus 100 años de vida. Un hombre que se ha ganado el amor y el cariño de la gente al recorrer el sector sur de la Ciudad con su carreta y su burro ‘Gabino’ para vender yukis y fruta durante más de 60 años.
El “Tío”, como comúnmente lo llaman los habitantes del sector sur de la Ciudad, recorre a sus 100 años de vida las colonias Praderas del Sur, Calderón, Fraccionamiento Monclova, Obrera Sur, Mezquital del Valle y Fraccionamiento Los Álamos, durante más de 60 años sin importar las inclemencias del tiempo.
La gente lo puede observar a bordo de su carreta de color amarillo, tirando de su inseparable burro ‘Gabino’ mientras la gente le grita ¡Tío!, ¡Adiós Tío!, y él grita ¡Hay Yukis!, y los saluda amablemente con su mano.
Ayer al visitarlo en su domicilio ubicado en la Calle 8 de la Colonia Calderón, mencionó que se siente muy agradecido con Dios por sus 100 años, y muy afortunado y agradecido por las muestras de cariño de la gente, de todas las generaciones.
Y mencionó: “Doy gracias a mi padre creador porque me ha dejado todos estos años. Estoy muy contento con mi padre creador y mis hijos, que me han apoyado. Se me fue mi compañera pero yo sigo siendo feliz con mis hijos”.
Al referirle las muestras de cariño de la gente revela: “Gracias al señor; señoras, jóvenes, jovencitas, niñas, niños, me dicen ¡Tío, Adiós! Gracias al señor yo veo el cariño de toda esa humanidad. Estoy muy contento y agradecido con todo el pueblo”.
En la entrevista menciona que a pesar del sol y las altas temperaturas prefiere recorrer las diferentes colonias del sector sur de la Ciudad que quedarse en casa, ya que, se siente fuerte para trabajar.
Y menciona: “Yo sigo trabajando y sé que el calor me domina, pero, luego me arrimó a una sombrita y ahí agarro tantito fresco. Pero, me conviene mejor sacrificarme que estar aquí sin hacer nada. Que vendí, que no vendí, pero ando en la calle”.
Y agrega: “Una hija y un hijo me dicen que ya no trabaje, que me quede aquí y ¡no hijos!, déjenme, déjenme hasta que ya no pueda, pero, si Dios me concede moverme sigo trabajando. Me siento todavía con ánimo de trabajar”.
Cabe mencionar que el Tío es originario de la presa en San Luis Potosí, donde tallaba palma y lechuguilla y trabajaba en una Mina de azogue, sin embargo, fue traído a Monclova, Coahuila, por familiares de su esposa.
Actualmente recibe el gran apoyo de sus hijas, ya que, en matrimonio con la señora Bonifacia Pecina González (quien falleció en diciembre del 2021) tuvo 10 hijos, de los cuales, 7 aún permanecen con vida.
Y aunque admite que está difícil la venta-por las altas temperaturas y el sol-revela que no se desalienta y sigue al pasito, recorriendo las diferentes calles del sector sur de la ciudad en espera de clientes.
Y finalmente revela: “En la tarde se van a reunir aquí todos mis hijos, yo le doy gracias al Señor porque mis hijos se preocupan; una viene a darme de almorzar, otra viene a darme de comer, estamos bien gracias al Señor”.