Fabiola Sánchez
“Yo pensé que iba a morir, porque estaba muy deshidratado y muy débil”, expresó Joshua Villarreal Hinostroza, el menor sobreviviente del trágico incidente en el que terminó un viaje en busca de una mejor calidad de vida.
El menor de apenas 17 años de edad quien logró reunirse con su madre, informó que su sueño se convirtió en una verdadera pesadilla que no terminará hasta que localicen a Irving Villarreal (primo), y a Diego Ibarra (amigo), quienes son dos de los 4 desaparecidos en la Sierra del Ejido Boquillas del Carmen.
“Irving me dijo que ya iba mareado, que no podía, pero lo ayudamos a seguir avanzando, yo le dije que le iba a llevar agua, caminé mucho para buscar agua y cuando regresé encontré al grupo en el camino, pero ya no lo llevan a él, lo dejaron atrás”.
Expresó Joshua con voz quebrada que, él quería regresar por Irving, sin embargo, el resto del grupo se impidió y le argumentaron que lo mejor era continuar que nada se podía hacer por ellos y ante el agotamiento que todos presentaban terminó por tomarles la palabra y continuar el camino.
“Irving y yo somos casi como hermanos, no pierdo la esperanza de que puedan localizarlo con vida”.
Señaló que, su principal intención de cruzar a Estados Unidos era lograr conseguir un empleo y poder ayudar a su madre con los gastos del hogar y mejor la calidad de vida de su familia, sin imaginar que ese sueño se vería frustrado por una mala planeación del viaje.
“Ellos nos lo platicaron sencillo y muy bonito, pero fue mucho lo que caminamos y terminaron abandonándonos a mitad del camino”.