Aun año de iniciar operaciones en Monterrey, el balance de Shriners Children´s incluye haber ido más allá del número de consultas y de la cobertura geográfica planeadas originalmente, así como el impacto positivo en cientos de niños con algún padecimiento ortopédico o cicatrices por quemaduras.
Desde que Shriners abrió su servicio gratuito dentro de las instalaciones de un hospital privado ubicado sobre la Carretera Nacional, las familias comenzaron a llamar con la esperanza de mejorar las condiciones de sus hijos.
Al inicio, la meta a un año en Monterrey era llegar a más de 400 cirugías y más de 2 mil 500 consultas.
Al momento se han realizado 629 cirugías, tanto ortopédicas como reconstructivas, y se han brindado 6 mil 900 consultas médicas, todo esto a pacientes de Nuevo León, Coahuila y Tamaulipas, las entidades contempladas originalmente; también de Chihuahua, Zacatecas, Durango, Sonora, Baja California y norte de Veracruz.
“La mayoría de estos pacientes nunca habían sido tratados”, dijo el doctor Marco Antonio Ascasio, encargado médico de clínica regia. “Hemos podido extender la misión de Shriners para llegar a más niños, mejorar la calidad de vida y desempeñar un papel fundamental en la salud y desarrollo de estos niños”.
La red Shriners opera desde 1922 gracias a la filantropía de la Fundación del mismo nombre. En el País, la de Monterrey es la segunda sede. La primera está desde 1945 en la Ciudad de México. A diferencia del famoso hospital en Galveston, la clínica en Monterrey sólo atiende cicatrices de quemaduras, no quemaduras agudas.
“El objetivo es darle a estos niños la oportunidad de poderlos integrar a la sociedad y esto es de forma gratuita”, comentó Ascasio.
“Para todo niño de cero a antes de 18 años es posible atenderlo tanto en lo ortopédico y en lo de cirugía plástica, que son las secuelas de quemaduras”.
Un servicio sin restricciones
El 40 por ciento de los pacientes atendidos en este año es por parálisis cerebral infantil, pero también por condiciones ortopédicas como enfermedad de Perthes, pie equinovaro, displasia de cadera, problemas de la marcha, y deformidades angulares de las extremidades inferiores.
El servicio se ofrece sin importar si el paciente tiene servicio de salud o su familia cuente o no con recursos económicos.
“No hay ninguna restricción. Hay algunos (familiares de) niños que tienen Seguridad Social que le piensan para aplicar porque a lo mejor creen que no se les puede atender”, dijo Ascasio.
“No hay ninguna restricción. (Tras solicitar una cita) se valora al paciente y luego, si requiere tratamiento, queda aceptado en el sistema Shriners, y le damos su atención”.
El equipo humano a cargo del servicio consiste en tres ortopedistas pediatras, un cirujano plástico, un anestesiólogo, y un pediatra, además del personal administrativo.
“Invitamos a los papás que tengan algún niño con algún problema ortopédico o alguna secuela de quemaduras”, dijo el directivo, “a que se acerquen con confianza con nosotros, que saquen alguna cita para poderles extender nuestra ayuda, seguir cumpliendo con la misión de Shriners”.
La inauguración de la sede fue el 29 de agosto del año pasado. La atención sin costo incluye consultas, estudios y cirugías.
Contacto
Para obtener una cita por primera vez: 55 5424 7890
Correo: mex-pacientesnoreste @shrinenet.org