El sexólogo David Barrios recomienda una serie de pasos antes de aventurarse a abandonar la monogamia
EL HERALDO DE MEXICO. El amor viene en diferentes formas. A algunos les gusta tener siempre a lado a su pareja, otros más optan por la individualidad e incluso hay algunos en los que la exclusividad no es un asunto relevante en su forma de querer al otro. De acuerdo con el sexólogo David Barrios, a este último tipo de uniones se les conoce como relaciones abiertas, aunque estas deben cumplir con ciertas características para ser denominadas así.
La primera de ellas es que deben ser consensuadas, suelen tener límites entre las actividades románticas y sexuales y además establece un acuerdo voluntario del cual cualquiera de las partes puede salir, de lo contrario, opina el experto, se estaría hablando de un engaño.
Las relaciones abiertas fortalecen el amor
David Barrios asegura que aunque parezca contradictorio, las relaciones abiertas ayudan a fortalecer el amor entre las personas cuando dejan de lado la moral que se les ha planteado desde hace varios años y además se alejan de la hipocresía, debido a que fomentan la sinceridad.
«No se trata de recurrir a la deshonestidad de muchas parejas cerradas que fingen demencia».
Añadió que aunque muchos se sientan listos para tener un amor sin barreras, es necesario que haya mucha apertura, honestidad, confianza, así como una personalidad fuerte, por lo que no recomendó a los que quieran vivir la experiencia solamente por hacerlo, que lo eviten.
Comentó que es necesario hacer una valoración psicoterapéutica con un especialista para conocer los alcances que pueda tener el carácter de cada uno y así evitar caer en situaciones que pueden comprometer la salud mental.
Los 4 secretos para que una relación abierta triunfe
El especialista indicó que estos romances solamente perduran cuando se cumplen con cuatro puntos determinantes que sirven para tener una unión sana y transparente.
El respeto a los acuerdos
Antes de iniciar cualquier unión de este tipo, las personas involucradas deben entender y establecer entre ambos los límites que están dispuestos a enfrentar.
A la vez, están obligados a acordar qué condiciones deberá tener la relación, si hay una duración estimada en esta, la cantidad de información que se dará e inclusive si hay alguna otra situación que no se ha abordado.
Igualdad en la pareja
«Muchas veces el machín clásico busca imponer sus normas», es la forma en la que el sexólogo aseguró que es vital para ambas personas que se tenga la sensación de que el otro está jugando con reglas claras y sin tratar de aprovecharse.
La forma más fácil para que estos amoríos fracasen es si uno trata de imponer su forma de pensar e inclusive implemente acuerdos que ponen en una situación desigual al ser amado.
Manejo de los celos
Aunque muchas personas digan que no suelen sentir celos, estos son propios de la naturaleza. Esta emoción forma parte de los mecanismos de defensa con la que los seres humanos sienten malestar al sentir que el objeto amado los puede abandonar.
Pese a la confianza que se tenga en el otro, es vital aprender a manejar estas situaciones, ya que no hacerlo puede detonar situaciones negativas que no solamente afecten a la unión, sino que terminen por ocasionar su finalización.
Sensación de plenitud
El especialista indicó que es indispensable que las personas que componen esta unión amorosa, que es diferente al poliamor, se sientan a gusto con el bienestar propio y el del otro a la hora de establecer nexos sentimentales o carnales con alguien más.
En estos casos, no basta con que uno se sienta feliz por lo que vive el otro, ya que los dos deben estar cómodos con lo que se ha establecido, así como con la forma en la que se es tratado.
¿Qué no es una relación abierta?
Destacó que uno de los mitos que hay en torno a este tipo de lazos amatorios es que una vez que se ha debido tener una relación abierta, se debe tener encuentros carnales o emocionales con cualquier persona.
«No se trata de ser irresponsables», dijo el sexólogo sobre la necesidad de que los amantes tomen todas las precauciones para impedir que sus parejas pasen por riesgos ligados con estas prácticas.
Barrios explicó que desde los años 70 se planteó inclusive teóricamente la posibilidad de que los individuos se alejaran de la hipocresía que representan las relaciones cerradas y la doble moral de engañar al otro.
No obstante, el especialista dijo que es encesario no solamente cuidar de la persona con la que se inició la primera relación, sinno también a las que se suman a este tipo de vida. Es decir,la mentira y el engaño no debe ser parte de ninguno d elos involucrados en el círculo.