Voces obreras interpretan la ruptura entre Alonso Ancira y Napoleón Gómez Urrutia como el principio del fin en la historia de la acerera
Alberto Rojas Carrizales
LA PRENSA
Arrugando el entrecejo, Alonso Ancira golpeó sonoro con los nudillos la mesa, luego aspiró profundamente su inseparable habano y casi a gritos, soltó; “en esta ocasión, no haré anuncio de inversiones, estoy aquí para denunciar una extorsión por un millón de dólares de Napoleón Gómez Urrutia”.
El 23 de mayo de 2008 iniciaba así un largometraje de hostilidades entre el principal accionista de AHMSA y el líder sindical, ahora, después de 16 años de pleitos en tribunales y zafarranchos de grupos rivales, la Corte determinó que el senador perdió los contratos, pero la acerera está en la zona cero con riesgo de ser rematada como chatarra.
En el análisis, algunas voces obreras, dicen; “hubiera, no existe, pero si Alonso Ancira se hubiese mantenido al lado de Napoleón Gómez Urrutia en 2018 habría llegado con musculatura financiera de la mano del senador al círculo cercano del Presidente Andrés Manuel López Obrador”. La ruptura fue como tentar a la suerte, ahora la ciudad vive en una burbuja de angustia.
Con la ruptura de Alonso Ancira y Napoleón Gómez Urrutia en 2008, la historia torció su curso en el caso de Altos Hornos de México, habían estado aliados, inclusive el empresario se resistió contra la designación en 2006 de Elías Morales como reemplazo del ahora senador.
Un juez federal determinó que no hubo extorsión del sindicato en aquel mayo de 2008 porque se trataba de revisión salarial de la Sección 288 con la Siderúrgica II, pero a Alonso Ancira le ganó el hígado, el tren cobró velocidad cuando los días 2 y 5 de septiembre en las secciones 147 y 288 se desconocía a Gómez Urrutia.
Luego el 4 de diciembre de ese 2008, Carlos Pavón fue aprehendido y trasladado al penal de Monclova por el supuesto fraude del millón de dólares, cuatro días después salió libre bajo fianza y finalmente un Juez Federal resolvió de fondo que no existió ningún delito. Hace 10 años se reanudó la refriega AAE-NGU por un chisme mediático.
Ahora ha trascendido que es famélico el expediente 19/2023 ventilado en el Juzgado II de Distrito en Concurso Mercantil, es decir, no contiene absolutamente nada, excepto la sentencia del juzgador Saúl Martínez Lira dictada en agosto de 2023. El grupo inversor metió una carta de intención para fondear 350 millones de dólares, pero ni firmas traía, no sorprendieron al juez.
Las ballenas no nadan en los ríos, por eso pareciera que los grupos financieros pastoreados por asiáticos y los estadounidenses de -Argentem Creek Partners- no se arriesgan a comprometer sus billetes verdes formalmente ante el juzgador del Concurso Mercantil que el próximo 5 de febrero podría ordenar desmembrar Altos Hornos de México para rematar sus activos como fierro vejo.
Ni siquiera oportunidad de los trabajadores de ver por el reojo de la cerradura, hay rastros de nerviosismo, el optimismo se agotó desde hace mucho en medio de un reparto de culpas, sin Altos Hornos de México en Monclova, la orquesta estará incompleta.
