Las redes sociales se han llenado de comentarios y memes que contribuyen al discurso de odio en contra de los no binarios.
La discriminación y el prejuicio hacia las personas no binarias, aquellas que no se identifican exclusivamente como masculinas o femeninas, constituye una forma de sexismo y un tipo específico de transfobia conocido como exorsexismo. Tanto las personas cisgénero como las personas transgénero binarias pueden ser perpetradores de esta discriminación.
Para comprender la importancia de este tema, es esencial definir el término «no binario», que se refiere a aquellas personas que no se identifican completamente con las categorías tradicionales de hombre o mujer. Estas personas pueden tener características físicas asociadas con un género en particular, pero no se identifican con ninguno de los dos.
Una parte crucial del respeto hacia las personas no binarias es el uso de pronombres adecuados que reflejen su identidad de género. Mientras que los pronombres tradicionales como él/ella pueden no representar a estas personas, algunos optan por pronombres como elle para nombrarse a sí mismos. Deliberadamente usar pronombres incorrectos para referirse a una persona no binaria constituye una forma de agresión que niega su identidad.
El rechazo a la identidad de género cobra vidas
La violencia y discriminación contra las personas no binarias pueden tener consecuencias devastadoras. Según la Encuesta Sobre Discriminación por motivos de Orientación Sexual e Identidad de Género realizada por el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) en México, siete de cada 10 personas no binarias han experimentado pensamientos suicidas o han planeado suicidarse. Además, el rechazo de la identidad de género por parte de los padres es una experiencia común para estas personas.
En el ámbito educativo, el 36% de las personas no binarias reportaron haber sido víctimas de violencia debido a su identidad de género. La invisibilización de estas identidades contribuye a perpetuar estereotipos de género y aumenta la vulnerabilidad de las personas no binarias a la discriminación y la violencia.
Para respetar la identidad de género de las personas, es fundamental no hacer suposiciones basadas en percepciones superficiales. Al conocer a alguien, es importante preguntar cómo prefiere ser nombrado.