En el ejido Primero de Mayo, Jesús Guadalupe “N” y sus hermanas se han dedicado a invadir propiedades desde hace diez años
Alexis Massieu
La Prensa
Con la garantía de que el Ministerio Público ya le había restituido la posesión de su terreno al afectado, el día de ayer un hombre acusado de cometer el delito de despojo en el ejido Primero de Mayo, pudo evitar ser llevado a un juicio oral, accediendo a una suspensión condicional del procedimiento, en la que quedó obligado entre otras cosas, a no volver a molestar a la víctima durante los siguientes 2 años.
Fue en el Centro de Justicia Penal, a 24 horas de haber restituido el terreno al afectado, por órdenes del Juez Roberto Flores Luna, donde se llevó a cabo la audiencia para la aprobación de una suspensión condicional de proceso identificado como la causa 911/2020, a favor del acusado Jesús Guadalupe “N”, y por estar conforme con ello la víctima identificada como Pedro Armando.
Las condiciones que se le impusieron como requisito a Jesús Guadalupe para poder terminar con el proceso en su contra sin que le queden antecedentes penales, son las de no acercarse a la víctima ni sus familiares y testigos, a sus domicilios y al terreno del que fue despojado Pedro Armando, según su dicho, hace más de 10 años.
Si durante los próximos dos años, es decir, hasta el día 28 de febrero del 2026, el acusado Jesús Guadalupe “N”, cumple con todo lo pactado, el caso se va a tener por concluido, pero si no se cumple, el acusado será llevado al juicio.
RECUPERAN TERRENO EN OPERATIVO
De acuerdo a lo manifestado por el Ministerio Público, la diligencia con la cual fueron desalojados los posesionarios, y restituido el terreno de la calle Ignacio Zaragoza del Ejido Primero de Mayo en el municipio de Escobedo, a su legítimo dueño, se llevó a cabo el día 28 de febrero por la tarde, y antes de que oscureciera, quienes se metieron a la mala, ya se habían sacado de manera voluntaria casi todas sus pertenecías, salvo las gallinas, que se subieron a dormir a los árboles y no hubo quien pudiera bajarlas.
Pese a que la casa de la que fue despojado Pedro Armando, un hombre de la tercera edad que usa silla de ruedas tras muchos años de trabajar en la labor, estaba amueblada, y en ella tenía muchos materiales que tras el desalojo ya no encontró, así decidió aceptar que el proceso penal terminara mediante una suspensión condicional.
Cabe señalar, que Jesús Guadalupe “N”, tiene otros procesos penales abiertos en su contra pode delitos similares, en donde junto a sus hermanas, se ha enfrentado a los ejidatarios por despojar a lugareños y foráneos de terrenos que adquirieron de manera legítima, como es el caso de una ciudadana norteamericana, que compró un solar donde construir una casa de descanso.
Por acuerdo tomado por los ejidatarios, Jesús Guadalupe “N”, y sus hermanas están desterrados, sin embargo, nunca se han ido de esa comunidad.