Autoridades revelaron que el hombre dejó una carta con un notario en la que revelaba sus intenciones.
Durante la noche del miércoles 6 de marzo, vecinos alertaron a las autoridades tras escuchar múltiples disparos de arma de fuego en la calle Carrizalejo, en la colonia Valle de Chipinque.
Al llegar al lugar, los oficiales encontraron los cuerpos sin vida de Elida Rodríguez Villarreal, de 79 años, y su hijo Esteban Berard Rodríguez, de 52 años, en una de las habitaciones de la vivienda.
Según las primeras investigaciones, Esteban habría disparado a su madre después de una discusión acalorada sobre propiedades y herencia, para luego acabar con su propia vida.
El homicida dejó una nota ante un notario expresando sus intenciones. Además, se hallaron varios documentos relacionados con bienes raíces en la vivienda, lo que sugiere que se dedicaba a ese negocio.
Personas cercanas describieron la relación entre madre e hijo como buena y a Esteban como un hombre tranquilo, dejándolos sorprendidos por lo ocurrido.
Actualmente, la vivienda donde ocurrieron los hechos está bajo custodia de la Policía de San Pedro, con sellos de aseguramiento temporal visibles en el lugar.
