La candidata de Morena rechazó la invitación que le lanzó su rival a su llegada al Tercer Debate Presidencial, al que llegó Jorge Álvarez Máynez acompañado por Luis Donaldo Colosio Riojas.
Por Mathieu Tourliere
Proceso
CIUDAD DE MÉXICO.- Envalentonada por la llamada Marea Rosa, que movilizó a decenas de miles de personas en 80 ciudades hoy, la candidata del bloque opositor a la presidencia de la República, Xóchitl Gálvez Ruiz, retó a Claudia Sheinbaum Pardo a tener un cuarto debate «cara a cara» antes de las elecciones del 2 de junio.
La candidata de Morena, quien tiene una amplia ventaja en las encuestas, rechazó la invitación de su rival, con el argumento de que ya tiene programado su cierre de campaña.
«Ya son tres debates», dijo la exjefa de gobierno capitalino, quien aprovechó la tribuna del Centro CulturalUniversitario Tlatelolco (CCUT), sede del tercer debate presidencial, para reiterar que su evento de cierre tendrá lugar en el Zócalo el próximo 29 de mayo.
Siguiendo el guion del Instituto Nacional Electoral (INE) para el tercer debate, los tres candidatos a la presidencia, Gálvez, Sheinbaum y Jorge Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano (MC) llegaron por separado al recinto y dieron declaraciones a la prensa antes del arranque del ejercicio.
Gálvez fue la primera en arribar al templete instalado por el INE en la explanada del CCUT; flanqueada por Santiago Creel, su jefe de campaña, y mujeres a las que invitó al evento, la exsenadora presumió el éxito de la manifestación que tuvo lugar por la mañana, pues aseveró que «nos quedó chiquito el Zócalo».
A pesar de las evidencias de que las movilizaciones de ciudadanos vestidos de rosa –en defensa del INE, de la democracia y la Marea Rosa– estuvieron organizadas por los partidos de oposición desde hace meses, Gálvez aseveró que la «marea rosa» fue un movimiento ciudadano «espontáneo», que se convirtió en «activismo político». Agregó que, si bien siempre viene «cargada de energía», el evento de la mañana la puso al «triple».
La abanderada de la coalición PAN-PRI-PRD adelantó que, en el debate, denunciará el «fracaso de la política económica» del gobierno y sus efectos en la migración de cientos de miles de mexicanos; hablará sobre la crisis de desplazamiento interno provocado por la violencia; y planteará temas relacionados con la separación de poderes.
«No sé si anda ahí (Arturo) Zaldívar”, lanzó la política hidalguense, en referencia a la investigación en el Poder Judicial sobre presuntas acciones de injerencia de Zaldívar –ahora integrante de la campaña de Sheinbaum– cuando presidía la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
«Muy tranquila»
Claudia Sheinbaum llegó al CCUT pocos minutos después de Gálvez, y fue recibida por integrantes de su campaña al grito de «pre-si-denta»; unos eran efusivos, como Mario Delgado Carrillo y Manuel Velasco, respectivos líderes nacional de Morena y del PVEM, otros fueron más discretos, como Marcelo Ebrard Casaubón, quien compitió contra Sheinbaum por la candidatura presidencial de Morena y la acusó de cometer un fraude cuando ella salió triunfadora.
Sonriente, Sheinbaum subió al templete de prensa y expresó su confianza de que «como en los otros dos (debates) vamos a ganar nuevamente porque tenemos proyecto, programa, y sobre todo mucha convicción y amor por el pueblo».
La puntera de las encuestas se dijo «muy tranquila» respecto a los resultados de las elecciones, pues aseveró que cuenta con el respaldo de «millones y millones de mexicanos y mexicanas» y planteó que su programa fue diseñado con base en más de 400 mesas de trabajo.
Preguntada sobre la inseguridad en el país y los asesinatos de candidatos, la exjefa de gobierno confió en que el INE trabajará de la mano con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) para tener una «elección pacífica».
Máynez llega con Colosio
Jorge Álvarez Máynez, candidato por MC, llegó cinco minutos después de la hora programada, y subió al estrado con varios cuadros del partido, a quienes agradeció por su apoyo. Destacó a Dante Delgado Rannauro, el líder nacional, y a Luis Donaldo Colosio, quien causó polémica la semana pasada al sugerir que MC y el bloque PAN-PRI-PRD deberían evaluar una declinación para presentar una candidatura única a la presidencia.
Álvarez Máynez insistió en que su campaña ha sido «exitosísima» y que no ha dejado de crecer en «todas las encuestas», lo cual evidencia que MC representa una «tercera opción», «más allá de la polarización». El diputado zacatecano aseveró que su partido tiene las puertas abiertas a «personas de otras afiliaciones partidistas», pues recalcó que en todos los partidos hay «gente valiosísima».