La relación entre Angelique Boyer y Sebastián Rulli ha sido objeto de admiración y especulación en el mundo del espectáculo. Con una década de amor, la pareja revela un peculiar secreto que podría explicar la solidez de su vínculo: no viven juntos de manera formal. Aunque esta decisión podría sorprender a muchos, para ellos ha sido clave para mantener la armonía en su relación.
Ambos actores, reconocidos por su trabajo conjunto en exitosas producciones como “Teresa” y “Lo que la vida me robó”, así como en la próxima serie “El extraño retorno de Diana Salazar”, han encontrado en su singular dinámica la fórmula para conciliar el amor y la vida profesional.
Según confesaron en una entrevista para el programa “El gordo y la flaca”, compartir escenario no solo fortalece su relación sino que les permite valorar aún más su tiempo juntos.
El secreto de su amor tras 10 años juntos
A diferencia de la creencia popular, Angelique y Sebastián encuentran en la distancia física una oportunidad para mantener viva la llama del amor.
“Él llega a su casa, yo llego a la mía y todos estamos muy contentos”, afirmó Boyer, dejando en claro que esta modalidad les otorga la libertad y el espacio necesarios para cuidar su relación.
Además, desmintieron la idea de que trabajar juntos los aleja, al contrario, encuentran en el set de grabación un espacio de crecimiento mutuo.
Aunque no comparten el mismo techo de manera formal, cuentan con un refugio común en la montaña, un lugar que han construido juntos y que representa el vínculo que han forjado a lo largo de los años. En medio de rumores de separación que circularon en redes sociales, la pareja se muestra más unida que nunca.
