Junto a dos cómplices aun prófugos, Mariano “N” adelantó la sentencia de muerte al taquero Antonio García Ordaz, en crimen de hace 4 años
Alexis Massieu
La Prensa
– ¿Qué vas a ordenar? -, preguntó el taquero a quien sería su verdugo cuando lo vio entrar en la taquería: nada -le contestó-vengo a matarte Borrado, y enseguida le disparó a quemarropa con una escuadra 9 milímetros en la cabeza. En eso consistió la acusación que el día de ayer realizó la Fiscalía General del Estado, en contra de Mariano “N”, por el homicidio calificado de Antonio García Ordaz, la noche del 5 de agosto de hace 4 años.
Tras capturarlo el pasado miércoles, cumplimentando una orden de aprehensión, elementos de la Agencia de Investigación Criminal, condujeron al presunto homicida Mariano “N”, ante el Juez Penal Oscar Cadena García, para dar inicio con el proceso legal en su contra, por la muerte violenta del taquero, al interior del establecimiento que tenía en la calle Juan Antonio De la Fuente, de la colonia Asturias.
Según las investigaciones, Mariano “N”, y dos presuntos cómplices, detuvieron el vehículo en el que viajaban–un PT Cruiser de color negro sin placas de circulación–a una cuadra de distancia de donde estaba la taquería, a la que él, seguido por otro hombre cuya identidad es desconocida, llegaron caminando y llevando puestos un cubrebocas.
Eran cerca de las 20:00 horas, y en el exterior del negocio, en una de las mesas, se encontraba Luis “N”, cliente y amigo del Borrado, que solía ir a ayudarle, el cual; al ver a Mariano, le preguntó si quería cenar, y este moviendo la cabeza le respondió que no.
QUEDA GRABADO EN VIDEO
En el video que grabaron las cámaras de seguridad de una pizzería aledaña, se pudo apreciar como justo al entrar a la taquería, el presunto homicida se levanta la playera y saca el arma de fuego, y casi de forma inmediata sale del lugar, para irse a toda prisa en compañía de su cómplice, hacia donde estaba el vehículo de la marca Chrysler en el que habían llegado.
¡Sobres Mariano!, fue lo que presuntamente le dijo el otro hombre al autor material del crimen, cuando ya se aproximaban a la taquería, siendo hallado el vehículo en el que escaparon, sobre la calle 7 de la colonia El Álamo, el cual fue asegurado por la policía, junto a las cachuchas que llevaban puestas dos de los tres implicados, una de las cuales la portaba Mariano.
Como se recordará, Antonio García Ordaz, fue llevado de emergencia al Hospital General de Zona número 7 del IMSS, sin embargo; al poco tiempo de ingresar al área de estabilización, sucumbió a la severa lesión craneoencefálica que le dejó el proyectil del arma de fuego, según el casquillo percutido que se encontró, marca Luger de 9 milímetros.
HOMICIDA CALLA
Cuando le llegó el turno de declarar a Mariano “N”, por consejo de su abogada de oficio, decidió guardar silencio, y para preparar su defensa, le solicitó al juez, el plazo de 144 horas, razón por la que la audiencia inicial fue suspendida y se reanudará el próximo lunes 5 de agosto, cuando se decidirá en pleno aniversario luctuoso del Borrado, si se le dicta o no, un auto de vinculación a proceso.
Mientas tanto, el presunto homicida permanecerá detenido en las instalaciones del C4 en Ciudad Frontera, como una medida de protección a favor de las víctimas indirectas y los testigos, pero también; para que Mariano “N”, no se vaya a dar a la fuga, saliendo a relucir que durante todo este tiempo, pudo permanecer oculto de las autoridades en la ciudad de Piedras Negras.
“VENGO POR LA BENDICIÓN”
El 5 de agosto, por la tarde, Mariano “N” fue a ver a Alma Lucinda, para que le diera la bendición, porque ese mismo día iba a tener que irse de la ciudad, llevaba puesta una playera de color naranja, un pantalón de mezclilla y una gorra con figuras de camuflaje y de color beige.
Esa fue la última vez que ella lo vio, le contó a la policía cuando detrás de la pista del homicida del Borrado, llegaron hasta la puerta de su casa en la colonia Colinas de Santiago, mostrándole un video en el que se podía ver a los sospechosos, y en el que ella pudo reconocer a Mariano, pese al cubrebocas, porque llevaba puesta la misma ropa, y habían estado juntos cerca de un año.