Esta deliciosa fruta es rica en antioxidantes y ha sido utilizada durante siglos en la medicina tradicional
La mora, un fruto pequeño pero lleno de beneficios, es el aliado perfecto para mantener tus articulaciones fuertes y tu corazón saludable. Lee a continuación y descubre cómo puede hacer una gran diferencia en tu bienestar.
Según la Fundación Española de Nutrición (FEN), la composición rica en colágeno de las moras las convierte en un aliado natural para mantener en buen estado los tejidos conectivos del cuerpo, como tendones, ligamentos y cartílagos.
-¿Cuáles son los beneficios de la mora?
El colágeno presente en las moras es esencial para el mantenimiento y regeneración del cartílago, la estructura que recubre y protege las articulaciones. Consumir esta fruta regularmente ayuda a prevenir el desgaste de estas estructuras, aliviando el dolor y la rigidez asociados con afecciones como la artritis.
Además, gracias a su capacidad antiinflamatoria, las moras también pueden reducir la inflamación en las articulaciones, mejorando así la movilidad y disminuyendo el riesgo de lesiones, algo clave para quienes practican deporte o son propensos a dolencias articulares.
No solo las articulaciones se benefician de las moras. Estas frutas también son ricas en antocianinas, unos flavonoides que tienen efectos positivos sobre la salud cardiovascular. Ayudan a mejorar la función de los vasos sanguíneos y a reducir el colesterol LDL, conocido como “malo”, mientras aumentan los niveles de colesterol HDL, el “bueno”.
Esto contribuye a la prevención de enfermedades cardíacas y reduce el riesgo de formación de placas en las arterias, esto de acuerdo a un artículo realizado por la Universidad de Costa Rica.
Uno de los beneficios más reconocidos de las moras es su capacidad antioxidante. Al ser ricas en vitamina C, E y antocianinas, estas bayas combaten los radicales libres, moléculas que aceleran el envejecimiento celular y están implicadas en el desarrollo de enfermedades crónicas como la diabetes o problemas cardiovasculares.
Incorporarlas a la dieta es una forma efectiva de apoyar la salud general y mantener el organismo protegido contra el daño celular.
POR: INFORMADOR