A diferencia del resto de los implicados, que se encuentran presos desde el 2022, Erick Abizael “N” dueño del anexo Escudo de Salvación y su guarura Ángel Arturo “N”, siguen libres y ahora sin la carga económica del localizador
Alexis Massieu
La Prensa
Por orden de un tribunal, dos de los diez presuntos homicidas de Jesús Alfredo Salayandia Reyes, en el anexo Escudo de Salvación, Erick Abizael, y Ángel Arturo “N”, continuarán en libertad portando un brazalete, pero sin tener que pagar el mantenimiento del dispositivo, de 9 mil 800 pesos mensuales.
Fue el día de ayer, que conforme a los criterios establecidos por el juzgado de amparo, en el “caso Rubí”, a quien dejó de cobrársele el brazalete, El Magistrado Hiradier Huerta, del Tercer Tribunal Distrital, le dio la razón al abogado de quienes están siendo procesados por homicidio.
De esta manera, el par de acusados seguirán siendo vigilados mediante el localizador electrónico, pero los gastos correrán a cargo del Estado.
Cabe señalar que mientras Erick Abizael y Ángel Arturo “N”, siguen su proceso en libertad portando un brazalete que ya no tendrán que pagar, el resto de los presuntos implicados—salvo uno que no ha comparecido a juicio—se encuentran en prisión acusados del mismo delito.
Como se recordará, Salayandía Reyes fue encontrado sin vida cerca del mediodía del viernes 8 de julio en el centro de desintoxicación Escudo de Salvación ubicado en la calle Allende número 712 de la colonia Occidental de Ciudad Frontera.
Tras 2 días de investigaciones, se emitieron por parte de un juez penal, ordenes de aprehensión en contra de los internos Noé Tiburcio, Rodolfo Eliud, Daniel Alberto, Axel Iván y Mario Alberto “N”, los padrinos Dagoberto y Juan Carlos “N”, los cuales se encuentran en prisión, pero además, se ordenó la captura del propietario del lugar Erick Abizael; su escolta Ángel Arturo “N”, y una persona más de su equipo de seguridad que sigue prófugo.