Alumnos y docentes de la Secundaria Técnica 31 de Nadadores reconocen su esfuerzo y dedicación por sus 30 años de enseñanza
Por: Octavio Cordero
La Prensa
En un emotivo acto celebrado en la Secundaria Técnica 31 Doctor Ángel Martínez alumnos, compañeros docentes se unieron para despedir al profesor Antero Elizalde Mata Ramos quien tras 30 años de dedicación a la enseñanza, se jubila. La ceremonia, llena de recuerdos y agradecimientos, tuvo lugar el pasado martes en la institución educativa, donde se reunió toda la comunidad escolar para hacer una valla humana que con globos y porras despidieron a tan distinguido profesor.
El profesor Antero conocido por su pasión por la biología y la agricultura mantuvo un gran compromiso con el desarrollo de sus estudiantes, recibió múltiples muestras de cariño y regalos durante el evento. Alumnos actuales y antiguos compartieron anécdotas sobre cómo su enseñanza influyó en sus vidas, resaltando no solo su capacidad pedagógica, sino también su empatía y apoyo en momentos difíciles.
«El profesor Antero no solo nos enseñó a sembrar y conocer la naturaleza por medio de la biología, sino que nos educó a ser mejores personas. Siempre estuvo allí para escucharnos y guiarnos», expresó Valeria Tobar Espinoza una de sus alumnas más destacadas.
Durante el acto, sus colegas también compartieron palabras de reconocimiento. La directora de la escuela, Profesora Sara Rodríguez Romero y El Subdirector Jesús López Torres, destacaron su profesionalismo y dedicación. «Es un día agridulce; nos sentimos felices por él, pero tristes por su partida. Su legado permanecerá en cada rincón de esta escuela, como compañero de trabajo estuvo a mi lado en momento difíciles de mi vida dándome ánimo y motivación», mencionó la maestra Gabriela Cortez.
Por su parte el médico Ricardo Flores Castillo, profesor de ganadería no pudo disimular su tristeza pues fue con quien compartió los sagrados alimentos durante el receso escolar durante muchos años.
El profesor, visiblemente emocionado, agradeció a todos por el apoyo recibido a lo largo de los años. «Cada uno de ustedes ha dejado una huella en mi vida. Mi trabajo aquí ha sido un verdadero honor. Llevaré conmigo cada risa, cada desafío y cada triunfo que vivimos juntos», y se despidió diciendo:
» Escuela Secundaria Técnica 31 GRACIAS no es un adiós sino un hasta luego»
La ceremonia concluyó con un aplauso atronador y un sin número de porras en honor al profesor Antero, quien se embarcará en una nueva etapa de su vida, pero cuyo legado perdurará en la comunidad educativa.
Finalmente firmo el libro de salida de su escuela que lo vio llegar siempre con su sonrisa y una excelente actitud personalidad que lo distinguía.