La mujer fue llevada ante el Juez, acusada de golpear a su pareja con puños y un tubo, además de destrozarle el coche y su teléfono
Alexis Massieu
La Prensa
Por el delito de violencia familiar, en donde la víctima es un elemento de la policía estatal, una mujer que fue llevada ante un juez penal el día de ayer, acusada de golpear a su ex pareja con los puños y con un tubo, además de destrozarle el coche y su teléfono celular, y todo porque no le dio dinero más que para los gastos de su hija. “¡te voy a matar… joto!, defiéndete”, le gritaba.
Fue en el Centro de Justicia localizado en Ciudad Frontera, donde se dio inicio al proceso penal identificado como la causa 934/2024, en contra de la acusada Rubí Alejandra “N”, por la agresión cometida en perjuicio de Jesús Ramiro, con quien tuvo una relación intermitente que duró 2 años.
Según lo expuesto ante el juez, por parte del Ministerio Público, los hechos ocurrieron el pasado 28 de agosto cerca de las 17:30 horas sobre la calle Pedro Anaya en la colonia Obrera Sur Segundo Sector, por donde el afectado, en compañía de su hija, y de Rubí Alejandra, iba circulando abordo de un Volkswagen Vento de color blanco.
Jesús Ramiro detuvo la marcha, y mientras cargaba a la pequeña, le entregó a Rubí Alejandra 3 mil pesos para que ella pudiera cubrir gastos de su hija, más otros 2 mil pesos para ella. Eres un… (comenzó a insultarlo), y agregó: “sí tienes dinero”, al tiempo que empezaba manotear y a jalarlo del cuello de la camisa.
Llevando a la niña en brazos, el afectado descendió del vehículo, haciendo ella lo mismo, para enseguida empujarlo, lo cual hizo que cayera al piso, donde ella comenzó a darle golpes con los puños.
Una vecina de nombre Ruth, salió de su domicilio para resguardar a la niña en su casa, mientras que Jesús Ramiro Seguía en el piso con Rubí Alejandra lanzándole golpes, y arrojando su teléfono Iphon X Pro Max al suelo, el cual se quebró al chocar con el pavimento.
Mientras la vecina cuidaba a la niña, su esposo de nombre Abel, llamaba a la policía para reportar el incidente, mismo que decidió intervenir para quitársela de encima a la oficial de policía, metiéndolo en la cochera, a donde ella también ingresó para tomar un tubo con el que le pegó en una pierna, en la cual la víctima tiene una lesión, que no le permite andar con normalidad.
“Te voy a matar… joto, defiéndete” le gritaba, cuando el vecino para alejarlo de ella lo metía a su casa, viendo desde la ventana, como ella se fue a su propia casa para regresar armada con un manubrio, con el cual comenzó a golpear su coche, quebrándole el parabrisas delantero y el trasero, además de los faros y las calaveras, y causándole abolladuras en el cofre y otras partes de la carrocería.
Eran cerca de las 18:00 horas cuando llegó la policía, y como ella les dijo que él la había agredido, ambos fueron detenidos, aunque momentos más tarde, cuando se aclaró lo sucedido, a Jesús Ramiro lo liberaron.
Además del informe rendido por la policía, y lo declarado por los testigos, entre las pruebas que se presentaron en contra de Fabiola Alejandra “N”, están los resultados del examen psicológico a la víctima, quien presenta un cuadro de ansiedad, depresión, baja autoestima, y un sentimiento de humillación.
Durante la audiencia, en la que la acusada se negó a declarar, se indicó que el episodio de violencia familiar por el que fue denunciada, no fue la primera agresión, sino que tiempo atrás en el mes de mayo, ya lo había golpeado, lastimándole la pierna que tiene afectada.
Para que su abogado pueda preparar una buena defensa, Fabiola Alejandra solicitó un plazo de 144 horas, razón por la que se suspendió la audiencia y se va a reanudar el próximo 19 de noviembre a las 10:30 horas, fecha en la que se resolverá si la vinculan o no a proceso, donde además de las lesiones, las afectaciones implican los daños valorados en 21 mil 900 pesos.
Como medida cautelar a favor del afectado, el juez le prohibió a Fabiola Alejandra “N”, acercarse a él, no realizar ningún acto de intimidación o molestia, y a no comunicarse por ningún medio incluyendo a otras personas, salvo su abogado.