Un símbolo eterno de esperanza y renovación que une tradiciones paganas y cristianas durante la Navidad
Las coronas navideñas son un símbolo decorativo que ha trascendido fronteras y épocas, transformándose en un ícono de las celebraciones decembrinas alrededor del mundo.
Este ornamento, presente en puertas, mesas y chimeneas, guarda un trasfondo lleno de historia, tradición y simbolismos que conectan con la prosperidad, la salud y la esperanza.
–La historia detrás de las coronas
La tradición de colocar coronas en las puertas tiene raíces profundas que se remontan a la Antigua Roma. De acuerdo con el sitio de Muy interesante, durante las celebraciones de Año Nuevo, los romanos solían regalar ramas de árboles “siempre verdes” conocidas como strenae, en honor a Strenia, la diosa de la salud.
Estas ramas simbolizaban un deseo de bienestar y salud para el año que comenzaba. Con el tiempo, estas ofrendas evolucionaron en guirnaldas circulares que adornaban las puertas de los hogares.
El círculo, sin principio ni fin, representaba el ciclo de la vida, el renacer de la naturaleza tras el invierno y la esperanza de prosperidad. Además, durante las fiestas de Saturnalia dedicadas a Saturno, dios de la siembra, las coronas se utilizaban para agradecer las cosechas y celebrar la llegada de la primavera.
En las culturas griega y romana, las coronas también se usaban como símbolo de autoridad, victoria y poder. Se colocaban en ceremonias religiosas, festividades cívicas y, en algunos casos, acompañaban a los difuntos como símbolo de fuerza y trascendencia en el más allá.
Con la llegada del cristianismo, esta tradición fue adaptada y resignificada, dando lugar a la corona de Adviento. Según la organización católica Mercy Home for Boys & Girls describe la corona como “un círculo de follaje verde que simboliza la eternidad de Dios, sin principio ni fin”. Este ornamento, decorado con velas, adquirió un profundo significado religioso al representar la esperanza y la vida eterna, conceptos que resuenan especialmente durante el periodo navideño.
Hoy en día, decorar la puerta con una corona navideña también es un gesto de bienvenida y buenos deseos para quienes visitan el hogar, además de ser un símbolo decorativo que transmite calidez, prosperidad y unión familiar en las festividades decembrinas.
POR: EL UNIVERSAL