DROGA NO PUEDE FABRICARSE EN COCINAS DE CULIACÁN, ASEGURA LA PRESIDENTA
La publicación del reportaje ha generado que el gobierno federal desacredite lo expuesto en él
Por Reforma
La Prensa
La conferencia de la Presidenta Claudia Sheinbaum sirvió para las Secretarías de Marina y de Salud refutaran el reportaje del New York Times sobre un narcolaboratorio de fentanilo en Culiacán, Sinaloa.
Para la Semar, el reportaje no tiene elementos sólidos para conocer cómo fue el proceso de síntesis de la droga y los precursores químicos utilizados.
Al presentar un análisis de la publicación del diario estadounidense, Juana Peñaloza, Teniente y química analista de precursores en campo de la Armada, expuso que no se mencionan químicos esenciales para sintetizar fentanilo, como 4-ANPP, anilina o cloruro de propionilo, y sólo muestran hidróxido de sodio y acetona, que son «sustancias comunes» en otros contextos.
La Teniente dijo que en dos videos y cuatro de las fotografías que acompañan el reportaje, se ve que los participantes no usaron equipos de seguridad mínimos, como respiradores o guantes especializados, necesarios para evitar la intoxicación con gases tóxicos o contacto directo con fentanilo puro.
«Derivado del análisis de la nota periodística, no es posible reunir indicios suficientes para determinar que se realizó un proceso de síntesis de clorhidrato de fentanilo en citada locación, debido a que se menciona muy poco o nada del proceso de síntesis y las sustancias utilizadas», se leía en la presentación de Peñaloza.
Además, los «cocineros» dijeron a las reporteras del NYT que tenían «tolerancia» a la droga y eso los protegía de efectos tóxicos.
Si eso fuera así, apuntó la Presidenta, no habría tantas muertes de sobredosis por consumo de fentanilo en el país vecino del norte, donde se trata de un problema salud pública.
«Vean lo que dice la nota, dice que quien fabricaba esto, estaba en el video, ‘tolerancia a la droga letal’, si hubiera tolerancia a la droga letal no habría las muertes por fentanilo que hay en Estados Unidos.
«Lo que estamos aquí, de lo que se trata esta discusión y esta presentación con base científica, es de si debemos o no, mencionar en esta mañanera y en cualquier lugar y en cualquier sitio, cuando hay una nota que evidentemente no tuvo información creíble, eso es lo que está a debate.
«Porque después de la nota del New York Times, se dejó venir en toda la prensa nacional, que ‘¿cómo era posible que la Presidenta presentara esto? Comentócratas, etcétera, etcétera, etcétera», reprochó.
La experta de la Semar agregó que cambiar la ubicación de un narcolaboratorio de forma intempestiva, como se asegura en el reportaje, no coincide con la «dinámica criminal».
«Respecto a lo mencionado por los supuestos ‘cocineros’ sobre el desmantelamiento de una casa de seguridad del grupo por parte del Ejército Mexicano, horas antes de la grabación de los videos y que derivado de esta acción habrían cambiado de ubicación el supuesto laboratorio con tal rapidez, no corresponde con la dinámica criminal habitualmente observada.
«Ya que normalmente, se presenta una interrupción o una postergación de las actividades ilícitas por un periodo mayor hasta encontrar un lugar adecuado para poder continuar con el acondicionamiento de tales drogas», señaló.
‘Caerían fulminados por vapor’
Alejandro Svarch, titular del IMSS-Bienestar, recordó que el fentanilo es 50 veces más potente que la morfina y su grado de toxicidad «compromete la vida del operador» e «inexorablemente» se necesitan controlar las condiciones de su producción en un laboratorio adecuado.
Sugirió que si lo reportado por NYT fuera cierto, el «cocinero» hubiera caído fulminado en 30 segundos debido a la exposición tóxica en la síntesis de fentanilo, pues es necesario un laboratorio especial y no una cocina doméstica.
«Para producir fentanilo, se requiere un laboratorio con condiciones donde se pueda regular y medir las condiciones de exposición, donde existan equipos de protección personal especializados para la elaboración de un proceso de síntesis química complejo como lo es la elaboración del fentanilo y con sistemas de ventilación profesionales, sobre todo sistemas de ventilación profesionales y no el ventilador presente en la nota.
«Muy sencillamente, si hubiera sido fentanilo lo que estuvieran produciendo, el operador, la persona que estaba haciéndolo, hubiera durado 30 segundos y hubiera caído fulminado, producto de los vapores que presenta la síntesis del fentanilo», añadió.