Con un inspirado corredor Cam Akers y entrando desde la banca del quarterback Jared Goff, los Carneros de Los Ángeles derrotaron 30-20 a los Halcones Marinos de Seattle y avanzan a la Ronda Divisional.
El novato Akers tuvo una noche para los libros de historia de los Carneros en postemporada al lograr 131 yardas y 176 totales, además de un TD por acarreo.
Goff tuvo que entrar al juego luego de que el titular John Wolford fue llevado al hospital tras un duro golpe en la primera mitad. Terminó con 155 yardas y un lance a la zona prometida.
Los Carneros entraron a los Playoffs como el sexto sembrado, por lo que si Chicago pierde ante Nueva Orleans entonces pase lo que pase será el rival de Empacadores de Green Bay, el uno de la NFC, en la siguiente fase.
La defensiva de los Rams devoró a Russell Wilson, quien fue capturado en cinco ocasiones y regaló un «pick six» vital.
Sin embargo, el triunfo le salió caro a los Carneros, que tuvieron terminaron el partido sin el defensivo Aaron Donald, el receptor Cooper Kupp ni el quarterback John Wolford.
Donald fue un dolor de cabeza para la línea ofensiva de Seattle, que no encontró cómo detenerlo. Irónicamente, la lesión del tacle defensivo sucedió justo después de derribar a Wilson, a quien capturó en dos ocasiones.
El caso de Kupp es el más preocupante, pues salió cojeando minutos antes del final del partido.
En cuanto a Wolford, quien inició el duelo en los controles, dejó su lugar en el primer cuarto por un problema en el cuello y obligó al recién operado Jared Goff a asumir la responsabilidad.
Goff, quien aún se recupera de una fractura en el pulgar, aceptó el reto para lanzar 155 yardas y un touchdown.
Seattle, que inició la temporada regular con marca de 5-0, tenía 10 partidos de Playoffs invicto como local, pero simplemente sucumbieron ante el asedio de la defensiva visitante.
