Dos hombres se hicieron pasar por trabajadores de la Profepa y se llevaron en dos ocasiones 55 ejemplares.
El Centro Universitario de la Costa, en Puerto Vallarta, Jalisco, fue escenario de un doble robo que pone en peligro a una de las especies más pequeñas y raras del mundo: la tortuga casquito (Kinosternon vogti) con el robo de 55 ejemplares de esta especie.
De acuerdo con la información difundida en el espacio de Nacho Lozano en Imagen Televisión a través de dos videos se exhibe que en diciembre y enero, alrededor de 60 de estos ejemplares fueron sustraídos de sus instalaciones por dos personas que se hicieron pasar por inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
El primer robo se hizo el pasado 9 de diciembre, cuando dos sujetos uniformados con distintivos de la Profepa ingresaron al laboratorio del Centro Universitario de la Costa, se observa cómo un laboratorista, confiando en su aparente oficialidad, les permite el acceso, facilitando el robo de 40 ejemplares.
El 13 de enero, los mismos individuos regresaron al laboratorio, esta vez de manera violenta. Rompieron ventanas y forzaron cerraduras, llevándose 15 tortugas adicionales.
La titular de Profepa, Mariana Boy afirmó que es probable que los perpetradores sean los mismos en ambos incidentes. “Les pareció muy fácil entrar nuevamente a la universidad conociendo la ubicación de los ejemplares”, declaró.
Resaltó que estas tortugas podrían estar destinadas al mercado negro asiático, donde la demanda de especies exóticas es alta. También se mencionó la venta nacional como mascotas, un comercio que las clasifica como “animales de compañía”.
En Estados Unidos, se han encontrado precios de hasta 20 mil dólares por ejemplar, reflejo de su rareza y de las crecientes amenazas a su existencia.
La tortuga casquito, descubierta en 2018, es endémica de los remanentes de humedales del valle del río Ameca, que divide Nayarit y Jalisco. Su área de distribución es sumamente restringida, lo que aumenta su vulnerabilidad. Además, el avance inmobiliario en Puerto Vallarta y Nuevo Vallarta continúa destruyendo su hábitat.
Con un tamaño de apenas 10 centímetros y una distintiva mancha amarilla en la cabeza, la “Chacuanita de Puerto Vallarta” enfrenta amenazas que incluyen el deterioro de los humedales y la caza ilegal.
El Centro Universitario de la Costa trabaja para preservar a esta especie, considerada la tortuga más pequeña del mundo. Además, la asociación civil Estudiantes Conservando la Naturaleza ha solicitado a la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) la implementación de medidas urgentes para protegerla.
En un contexto donde los ejemplares vivos son cada vez más escasos, estas iniciativas buscan frenar su extinción y garantizar que futuras generaciones conozcan a esta joya biológica mexicana.
Por Excelsior