Médico dictamina signos graves de deshidratación y desnutrición, con dramática pérdida de peso, por lo que su hermana decide sacarlo
Por Wendy Riojas
LA PRENSA
Con severos signos de deshidratación, desnutrición y maltrato, fue encontrado por su familia un interno del Centro de Rehabilitación CREA ubicado en la avenida Montessori de Monclova.
Fue gracias a la visita a un psiquiatra que Yasmín Franco pudo observar a su hermano Rafael Franco con aspecto cadavérico, débil, suplicándole que lo sacara del Centro de Rehabilitación porque no recibía agua ni comida.
Ella señala: “Cuando llevé a mi hermano con el psiquiatra se echó en llanto y me pedía que lo sacara; decía que se sentía débil, que no le daban agua y que no podía hacer pipi, bajó muchísimo de peso” dice con voz entrecortada.
Incluso señala que el doctor Margarito Lozano lo diagnosticó con una fuerte deshidratación y desnutrición y le pidió que lo trasladaran rápidamente al Hospital Amparo Pape de Benavides para que recibiera atención médica.
“Estaba en muy malas condiciones. No nadamás lo digo yo, lo dice el doctor, de hecho, tengo un dictamen médico donde me aseguran que presentaba desnutrición y deshidratación, no pensé que iba a encontrar a una persona esquelética”.
Ella revela que fue el propio Centro de Rehabilitación quien le pidió llevar a su hermano a un psiquiatra, sin embargo, antes de ello la presionaban para que pagara la mensualidad ya que se daría cuenta de las condiciones en que se encontraba.
En la entrevista señala que pagaba 6 mil 250 pesos mensuales, ya que, cobran 1 mil 500 pesos por semana con derecho a alimento, médico, enfermeras y psicólogo, sin embargo, señala que nunca vio al personal.
“El área donde ofrecen las juntas no son aptas, era puro chisme, le empezaban a decir cosas a las mamás en lugar de apoyarte, asesorarte y al médico y a las enfermeras nunca las vi”, denuncia la afectada.
Y aunque en un principio exigió la devolución de una mensualidad, señala, que se opusieron a pagarle ya que alegan que el paciente había destrozado 2 colchones, que agredía a otros internos y que tenía un problema mental.
Señala que su hermano tiene adicción al cristal, al resistol y a la bebida, sin embargo, la gente que lo conoce sabe que se portaba bien y que raras veces se tornada agresivo por lo que les extraña la postura del anexo.
Finalmente revela: “Ya no quiero la devolución del dinero, simplemente quiero que las mamás se den cuenta que les niegan el agua, el alimento; yo saqué a mi hermano caminando, pero, que otra persona no saque a su hijo en ataúd”.
Ella decidió sacarlo del anexo CREA y trasladarlo a RENACE donde dice ha mostrado mucha mejoría luego de 3 meses de sufrimiento que vivió en el otro centro de rehabilitación propiedad del estilista Rodolfo Zamora.