En un increíble video, se puede observar cómo la lejana Tierra aparece y desaparece detrás de la curva de la superficie lunar, mientras el módulo de aterrizaje realiza su segunda órbita a unos 120 kilómetros de distancia.
Luego de dejar la Tierra el 15 de enero, el módulo de aterrizaje Blue Ghost de la NASA ha estado enviando impresionantes imágenes del espacio. Sin embargo, recientemente, este módulo autónomo ha capturado una de las vistas más sorprendentes: un primer plano único de la Luna.
En un increíble video, se puede observar cómo la lejana Tierra aparece y desaparece detrás de la curva de la superficie lunar, mientras el módulo de aterrizaje realiza su segunda órbita a unos 120 kilómetros de distancia.
La imagen fue capturada el pasado 18 de febrero durante una secuencia en lapso de tiempo que muestra una visión deslumbrante desde el Blue Ghost mientras completaba su órbita. Después de tres pasajes alrededor de la Luna, la compañía que opera el módulo, Firefly Aerospace, está ultimando los detalles para su aterrizaje programado para el 2 de marzo.
En un mensaje en X, Firefly Aerospace comentó: «¡La Tierra sale, la Tierra se pone, repite!»
Mientras tanto, miles de internautas y amantes del espacio han quedado fascinados con las impresionantes vistas del satélite lunar, destacando su manto de cráteres profundos.
Lanzado desde el Centro Espacial Kennedy en Florida a bordo de un cohete SpaceX Falcon 9, el Blue Ghost transporta diez investigaciones científicas y demostraciones tecnológicas de la NASA, como parte de la iniciativa de Servicios de Carga Lunar Comercial (CLPS). Entre estos instrumentos se encuentran equipos para registrar datos sobre la superficie lunar y sistemas experimentales de rastreo GPS.
Durante su largo viaje, que abarcó varias semanas y recorrió unos 384,400 kilómetros, el módulo entró en órbita lunar el 13 de febrero, donde estuvo esperando 16 días. En ese tiempo, el Blue Ghost capturó imágenes impresionantes de la Tierra, que se fue haciendo más pequeña hasta convertirse en un diminuto punto pálido en la distancia.
Mientras orbita la Luna, el módulo ha estado realizando una serie de encendidos de motor para llevarlo a una órbita más cercana. El 18 de febrero, completó un encendido de tres minutos y 18 segundos que lo impulsó a una órbita más baja y elíptica alrededor del satélite.
Poco después, registró un sobrevuelo del lado oculto de la Luna (el que siempre está de espaldas a la Tierra) a tan solo 120 kilómetros de altitud. Aunque se le denomina comúnmente el «lado oscuro» de la Luna, este lado recibe la misma cantidad de luz solar que el lado cercano.
El Blue Ghost completó su tercera y última órbita lunar el lunes y ya se está preparando para las maniobras finales. A continuación, realizará un encendido de 16 segundos para entrar en una órbita casi circular y muy baja. Finalmente, una vez que esté a 100 kilómetros de la superficie lunar, encenderá sus motores durante 19 segundos para descender hasta su lugar de aterrizaje.
Se espera que el Blue Ghost aterrice en el borde oriental del lado de la Luna que mira hacia la Tierra, cerca de una antigua formación volcánica llamada Mons Latreille, dentro de la cuenca de 483 kilómetros del Mare Crisium o «Mar de Crisis». Desde allí, llevará a cabo una serie de estudios científicos sobre la superficie lunar.
Uno de los objetivos más interesantes es estudiar un fenómeno conocido como «levitación de polvo», que ocurre cuando el polvo lunar parece flotar sobre la superficie, una idea que fue descrita por primera vez por el astronauta del Apolo 17, Eugene Cernan, hace más de 50 años.
Después de completar su misión, el Blue Ghost operará durante 14 días terrestres, hasta que el lado cercano de la Luna quede en sombra, sumergiendo al módulo de aterrizaje en la fría noche lunar. Con temperaturas tan bajas como -130 °C y sin luz para recargar sus baterías, se espera que este ambiente extremo dañe la electrónica del módulo, poniendo fin a su misión.
POR: EXCELSIOR
