Los defraudadores operan todo el año, aprovechando la ingenuidad de sus víctimas y despojándolos de fuertes sumas de dinero
Alberto Rojas Carrizales
LA PRENSA
El empresario turístico local Enrique Oviedo, alertó la estafa permanente en la venta de falsos viajes nacionales e internacionales por empresas inexistentes que operan su mercado negro en redes sociales, aseguró que no son casos aislados y que los defraudadores operan todo el año, pegando en una ciudad y luego emigrando a otra.
Agregó que los defraudadores aprovechan la ingenuidad de sus víctimas despojándolos de fuertes sumas de dinero, pero afirmó que es un problema que se arrastra desde hace años, especialmente en periodos vacacionales cuando hacen de las suyas en aquellos que lamentablemente se dejan sorprender por su habilidad para estafar.
“Aprovechan sencillamente la ingenuidad de usuarios, es un tema nacional donde los defraudadores son empresas inexistentes, a través de redes sociales enganchan a sus víctimas, no existen físicamente como agencias y solo operan en redes sociales con nombres ficticios, no tienen un sitio bien establecido y estafan todo el año a quienes caen en su trampa”, abundó.
Recientemente, un septuagenario fue despojado de 30 mil pesos por una banda de estafadores que le hicieron creer que con esa suma podría viajar a Disneylandia con su familia, el hombre finalmente se dio cuenta de que había sido engañado.
Oviedo enfatizó la importancia de la prevención y la necesidad de estar alerta para evitar caer en estas trampas. “Es fundamental ser conscientes de los riesgos y tomar medidas para protegerse y no perder su dinero, además se han registrado casos masivos de afectación”, añadió el empresario del sector turístico
Cuestionado en cuanto a cuáles serían las principales alertas o señales para que algún interesado no se deje sorprender, Enrique Oviedo respondió que es bastante sencillo porque los estafadores carecen de instalaciones fijas, inventan grandes viajes a sitios de ensueño a precios irreales y son personas no conocidas en la ciudad.
“Su centro de operaciones lo tienen en redes sociales únicamente, por eso es fácil intuir que podrían ser víctimas de una estafa, no son personas de la ciudad y después que hacen de las suyas se mueven a otro sitio”.