Netanyahu afirma que Israel “cambia la faz del mundo” con la guerra contra Irán y llama a sumar fuerzas para destruir sus instalaciones nucleares.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró el jueves que Israel está “cambiando la faz del mundo” con su guerra contra Irán, pero que “toda ayuda es bienvenida” para destruir las instalaciones nucleares de Irán.
“Dije que estamos cambiando la faz de Oriente Medio, y ahora digo que estamos cambiando la faz del mundo”, afirmó Netanyahu a la emisora pública Kan. “Nos dirigimos a enorme victoria”, agregó.
Israel es “capaz de golpear todas las instalaciones nucleares de Irán”, pero “toda ayuda es bienvenida” para destruirlas, apuntó.
Siete días después del inicio de la guerra contra Irán, Israel ha destruido más de la mitad de los lanzamisiles iraníes, aseguró Netanyahu, según el cual Teherán plantea “dos amenazas existenciales a su país, la nuclear y la de los misiles balísticos”.
Cuando se le preguntó cuánto duraría esta guerra, Netanyahu eludió la pregunta: “Estamos luchando, no voy a dar nuestro calendario, no voy a decirles (a los iraníes) lo que estamos preparando”.
“Cuando te embarcas en una guerra, sabes cuándo empieza pero no cuándo termina”, dijo, antes de añadir: “vamos por delante del calendario que nos habíamos fijado, tanto en tiempo como en resultados, y el trabajo que hemos hecho es realmente excepcional”.
El dirigente israelí también calificó de “histórica” su decisión de embarcar a su país en una guerra sin precedentes contra Irán.
David Ben Gurión, fundador de Israel en 1948, “tomó la decisión de crear el Estado y yo tomé la decisión de asegurar su existencia”, afirmó, añadiendo que no permitiría que “3 miñ 500 años de historia judía llegaran a su fin por culpa de este ayatolá loco”, en referencia al líder supremo iraní, Ali Jamenei.
Los ataques israelíes han quitado la vida al menos a 224 personas en Irán desde el 13 de junio, según las últimas cifras oficiales.
En Israel, los ataques iraníes con misiles y aviones no tripulados han matado a 25 personas, según el gobierno.
POR: EXCELSIOR