El padre Néstor Martínez advirtió acerca de los riesgos de aislamiento y sus efectos principalmente en niños y adolescentes
Por Iván Villarreal
La Prensa
Néstor Martínez, vicario de la Diócesis de Saltillo y párroco de la Parroquia de Santiago Apóstol en Monclova, advirtió en su homilía sobre los riesgos del aislamiento provocado por la tecnología y su vínculo con el incremento de suicidios, especialmente entre adolescentes y niños.
En un mensaje dirigido a la comunidad, destacó la importancia de la sociabilidad como un principio básico para la salud mental y la convivencia humana. Martínez señaló que la tendencia a encerrarse en uno mismo, particularmente a través del uso excesivo del celular y las redes sociales, está alejando a las personas de relaciones auténticas. “Teniendo mi celular en la mano con buen internet, ¿para qué quiero a los demás?”, cuestionó, ilustrando cómo esta actitud fomenta el egoísmo y la desconexión social.
Criticó la idea de evitar interacciones humanas por temor a críticas o rechazo, lo que lleva a muchos a refugiarse en la tecnología en lugar de buscar compañía real. El párroco subrayó que la falta de socialización tiene consecuencias graves, como el aumento de casos de depresión y suicidios. “Nos tragamos todo, lo traemos aquí dentro”, expresó, refiriéndose a la acumulación de emociones no compartidas.
Enfatizó la necesidad de tener amigos verdaderos con quienes hablar y desahogarse, alguien que “conozca lo que pasa por mi mente, por mi corazón”. Según Martínez, expresar pensamientos y emociones es clave para evitar que las personas caigan en estados de desesperación.
Hizo un llamado a recuperar la sociabilidad como un valor esencial, promoviendo encuentros cara a cara, como tomar un café o visitar a un amigo, en lugar de depender únicamente de la tecnología. “Es un principio básico: la socialización, tener amigos con quienes platicar”, afirmó, instando a la comunidad a construir relaciones que fortalezcan el bienestar emocional y prevengan tragedias.