El obispo emérito Raúl Vera permitió que una mujer no ordenada participara en la Eucaristía, elevando el cáliz y pronunciando la plegaria, provocando indignación entre fieles
Monserrat Rodarte
LA PRENSA
SALTILLO, COAHUILA.- La misa celebrada el pasado martes en el Santuario de Guadalupe de Saltillo ha generado polémica luego de que el obispo emérito Raúl Vera López autorizara la participación de Emilie Smith, clériga de la Iglesia Anglicana de Canadá, en momentos propios de la liturgia católica.
Durante la celebración, Smith, vestida con una estola, pronunció parte de la plegaria eucarística y llegó a elevar el cáliz ya consagrado, acciones que, según el Código de Derecho Canónico, están reservadas exclusivamente al sacerdote celebrante (canon 907). El canon 1367, además, califica como sacrilegio todo ultraje cometido contra las especies consagradas.
La Diócesis de Saltillo informó que sostendrá un diálogo con el obispo emérito para analizar las implicaciones del hecho, al tratarse de un asunto delicado y de gran seriedad.
No obstante, precisó que el caso deberá notificarse al Dicasterio para la Doctrina de la Fe, el organismo vaticano con autoridad para emitir un juicio sobre lo ocurrido.
Asimismo, se informó que el hecho podría ser revisado por el Dicasterio para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, al tratarse de una situación directamente vinculada con la liturgia.
Cabe recordar que un dicasterio es un organismo de la Curia Romana —el conjunto de ministerios y departamentos que colaboran con el Papa en el gobierno de la Iglesia Católica a nivel universal—, cuya función es atender asuntos doctrinales, litúrgicos, disciplinarios y pastorales que exceden la competencia de las diócesis locales.