“LOS GOLPES NO ERAN DE UNA CAÍDA, ERAN PUÑETAZOS”
Abel Garza Alvarado asegura que su madre fue incinerada sin su permiso y que el cuerpo presentaba hematomas en el rostro; exige justicia
Por: José Hernández
LA PRENSA
NUEVA ROSITA, COAHUILA. – A 72 horas de que se hicieran públicas las denuncias por presuntos maltratos y negligencia en el Asilo de Ancianos de Nueva Rosita, Abel Garza Alvarado, hijo de la difunta “Doña Tinita”, anunció que presentará una denuncia formal ante el Ministerio Público contra quienes resulten responsables de la muerte y maltrato de su madre.
Abel Garza es el hijo de la adulta mayor de quien circularon fotos en redes sociales, con los ojos llenos de moretones, gráficas con las que acompaño la extrabajadora del Asilo de Ancianos, su denuncia en redes sociales.
El hombre relató que su madre permaneció dos años en la institución y que en cada visita la veía “cada vez más delgada, con hambre y con sed”.
“Siempre la notaba peor, me decía que la sacara de ahí porque estaba sufriendo, pero nunca quiso decir exactamente qué le hacían”, expresó.
Garza Alvarado señaló directamente a Lourdes Coronado, encargada del lugar, y a una trabajadora identificada como Claudia, a quienes responsabiliza del deterioro y muerte de su madre.
“Nunca me daban la cara, me restringían la entrada y hasta ordenaban que no me dejaran pasar porque, según ellas, la alteraba. Pero la verdad es que los que la alteraban eran ellos”, denunció.
El entrevistado relató que su madre fue incinerada sin que le permitieran verla, y que hasta la fecha no ha podido obtener el acta de defunción ni la autopsia correspondiente.
“Lourdes se encargó de todo. La incineraron y llevaron las cenizas al asilo. Yo fui a buscar el cuerpo y nadie me quiso decir dónde estaba”, afirmó.
Respecto a las imágenes que circularon en redes sociales, donde se aprecia a la adulta mayor con hematomas en el rostro, Abel aseguró: “Los golpes que tenía no eran de una caída, eran puñetazos. Mi madre estaba débil, mojada y sin fuerzas”, dijo con indignación.
El hijo de la fallecida también señaló que su propia hermana, quien firmó el ingreso de su madre al asilo, podría enfrentar responsabilidades por haber otorgado amplios poderes a las encargadas.
Garza Alvarado agregó que buscará asesoría legal para interponer la denuncia correspondiente, y pidió a las autoridades investigar el presunto maltrato, los golpes y las condiciones de alimentación en las que vivían los adultos mayores dentro del asilo.
“Voy a buscar un abogado, no me voy a quedar callado. Quiero justicia, que se haga la autopsia y se diga de qué murió realmente mi madre”, concluyó.