La empresa inició la expansión de su planta en Saltillo para fabricar la RAM 1500 Light Duty y proyecta mayor crecimiento, innovación y lanzamientos de nuevos modelos durante 2026
Liz de la Fuente
LA PRENSA
SALTILLO, COAHUILA.- Stellantis México dio inicio a la ampliación de su planta de Saltillo, un proyecto estratégico que permitirá la producción de la nueva RAM 1500 Light Duty para México, Canadá y otros mercados internacionales, consolidando la presencia de la compañía en Norteamérica y reforzando a Coahuila como un polo industrial clave del país.
Durante el arranque oficial, Carlos Rivera, gerente de Manufactura de Stellantis México, dio la bienvenida a autoridades, colaboradores y directivos y explicó que la extensión de la planta incluye una superficie de 166 mil metros cuadrados, con una zona de carrocerías equipada con 370 robots, una línea de pintura con 92 robots, un sistema adicional de pintura para cajas con 36 robots y tres líneas principales de ensamble. “Somos la primera planta en Norteamérica del grupo Stellantis en realizar subensamble de asientos, lo que nos coloca a la vanguardia de la manufactura automotriz en la región”, subrayó Rivera.
La planta, que actualmente opera con un turno, se prepara para el arranque de un segundo, con capacidad de producir 40 unidades por hora, lo que permitirá alcanzar hasta 163 mil vehículos al año y generar más de 2 mil empleos directos. Además, se incorporó una nueva instalación de tratamiento de aguas residuales como parte del compromiso ambiental y social de la compañía.
Por su parte, Daniel Alejandro González, director general de Stellantis México, destacó que la empresa espera un cierre de año sólido y competitivo. “Maximizamos los retos logísticos y arancelarios y los convertimos en oportunidad; seguimos trabajando con estabilidad y escuchando a nuestros trabajadores. La historia, el conocimiento y la calidad de nuestra gente son lo que nos distingue y nos permite proyectar un crecimiento importante hacia 2026”, indicó el ejecutivo.
González adelantó que la apertura del segundo turno en Saltillo dependerá de la demanda en México y Estados Unidos, y que la preparación del personal tomará entre dos y tres meses una vez tomada la decisión. A corto plazo, la compañía se enfocará en la producción de vehículos de gasolina y diésel, que actualmente representan la mayor demanda, mientras que la transición hacia autos eléctricos se mantiene como plan a futuro con próximos anuncios sobre lanzamientos.
El directivo resaltó que los avances y la competitividad de la planta provienen de la participación activa de los trabajadores y del diálogo constante con autoridades mexicanas y estadounidenses para sortear desafíos arancelarios. Además, aseguró que la estrategia incluye innovación tecnológica, eficiencia en la producción y generación de empleo estable, sin despidos a pesar del contexto global.
Stellantis también proyecta para 2026 un año de expansión con nuevos lanzamientos casi cada mes, tanto para el mercado local como para exportación, reforzando la línea RAM y consolidando a Coahuila como un centro industrial estratégico para la manufactura automotriz en México y Norteamérica.