El policía comunitario Gustavo Enrique “N” murió la noche del lunes mientras era atendido por personal médico el Hospital Regional Número 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social, en Morelia
Michoacán.- La Fiscalía General del Estado (FGE), confirmó que ascendió a seis el número de personas que han fallecido tras la explosión de una camioneta cargada con material explosivo, ocurrida el sábado frente a la base de la Policía Comunitaria del municipio de Coahuayana, en la costa del Pacífico de Michoacán.
Hasta esta mañana, la Fiscalía General de la República (FGR) aún no determina si la camioneta con explosivos fue un atentado del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), o si la carga explosiva fue manipulada por los elementos de la Policía Comunitaria.
La FGE reveló que anoche fue notificada del deceso del policía comunitario Gustavo Enrique “N”, por personal médico del Hospital Regional Número 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ubicado en el complejo de Ciudad Salud de Morelia.
Gustavo Enrique se suma a la m*erte de tres policías comunitarios más, así como a la de dos hombres civiles no identificados, de quienes al menos uno tripulaba la camioneta que explotó. Cinco policías comunitarios permanecen hospitalizados.
La FGE precisó que la camioneta con la carga explosiva era de la marca Dodge Ram, tipo Dakota, de color negro, la cual ingresó a Coahuayana a las 08:30 horas del sábado, proveniente de Tecomán, Colima.
Videos de cámaras de seguridad revelan que la unidad fue escoltada por al menos otros dos automotores y tres motocicletas, hasta la base de la Policía Comunitaria, donde explotó alrededor de las 11:40 horas, causando daños a una decena de inmuebles y a 12 vehículos, entre ellos dos camionetas tipo Suburban, con blindaje de fábrica, de la Policía Comunitaria.
La Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), de la FGR, mantiene la investigación del caso por el delito de delincuencia organizada. La indagatoria la realiza con apoyo de la Agencia de Investigación Criminal (AIC).
La Policía Comunitaria opera bajo el mando de Héctor Zepeda Navarrete “El Comandante Teto”, un exintegrante de los grupos de autodefensa que se levantaron en armas en 2014 contra el Cártel de Los Caballeros Templarios. En diversas investigaciones de la FGR y FGE, este grupo comunitario ha sido vinculado con el Cártel de Tepalcatepec, que encabeza Juan José Farías Álvarez, alias “El Abuelo Farías”, rival del CJNG.
Los gobiernos Federal y Estatal no reconocen a la Policía Comunitaria como una corporación de seguridad oficial, toda vez que sus integrantes se han negado a seguir los procesos que marca el Sistema Nacional de Seguridad Pública, como lo son los exámenes de control y confianza, así como el registro de armas de fuego.
El Ayuntamiento de Coahuayana, encabezado por el perredista Andrés Aguilar Mendoza “Pay”, informó que el municipio cuenta con una propia Policía Municipal, conformada por 11 elementos, por lo que la Policía Comunitaria opera de manera independiente a las autoridades.
Por Latinus