San José de Cupertino, O.F.M. Conv., o Copertino, (17 de junio de 1603 – 18 de septiembre de 1663) fue un fraile napolitano, santo de la Iglesia católica, de quien se dice que los fenómenos místicos de orden corporal alcanzaron un carácter notorio. Es considerado patrón de los viajeros en avión, los aviadores, los mentalmente discapacitados y los estudiantes en exámenes, esto último por las dificultades que debió atravesar en su etapa de estudiante.
Los estudios realizados sobre la vida de José de Cupertino señalaron reiteradamente que manifestó diversos fenómenos místicos de orden corporal. Entró en éxtasis en numerosas ocasiones. Cuando estaba en éxtasis no sentía nada, aunque lo pincharan con agujas, le dieran golpes con palos, o le acercaran a sus dedos velas encendidas. Lo único que lo hacía volver en sí era oír la voz de su superior que lo llamaba a que fuera a cumplir con sus deberes. Cuando regresaba de sus éxtasis pedía perdón a sus compañeros diciéndoles: «Excúsenme por estos ataques de mareo que me dan».
De los estudios realizados durante el proceso de su canonización surgió que José de Cupertino estaba dotado con el don de la levitación, siendo el primer santo en número de manifestaciones de dicho fenómeno. Se registraron más de setenta casos de levitación ocurridos solamente en la villa de Cupertino o sus alrededores.