Múzquiz, Coahuila. – A tres días de haber fallecido víctima del Covid-19, la mañana de este lunes, los fieles católicos de Múzquiz, se despidieron del Padre Gilberto Sánchez Cantú; sus cenizas a bordo de un vehículo, realizaron un recorrido que fue seguido por una caravana vehicular que recorrió las colonias: 28, Barrio La Piedra, Los Bosques y Fonasol.
Entre lágrimas, oraciones y con globos blancos, niños, adolescentes, jóvenes y padres de familia fieles católicos del Pueblo Mágico de Múzquiz, le dieron el último adiós al Padre Gilberto, en un homenaje más que se le rindió al amado líder religioso católico, que falleció víctima del Covid-19.
Fuentes oficiales de la Grey Católica, señalaron que tras los múltiples homenajes y ceremonias religiosas que se realizaron en honor del Padre Gilberto, sus cenizas fueron trasladadas y depositas a una cripta familiar en la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe de Nueva Rosita, donde será su última morada.
Como se había dado a conocer luego de que se supo del fallecimiento del reconocido sacerdote, víctima del Covid-19, sus restos fueron incinerados y se realizaría un recorrido en distintas ciudades y comunidades donde brindó sus servicios, siendo Múzquiz una de las ciudades donde por dos días se realizaron ceremonias en su honor, luego de ser recibido en esta localidad, por una caravana de vehículos en el arco de bienvenida, para continuar con las misas.
Como se recordará el padre Gilberto Sánchez Cantú, fue el cuarto sacerdote de Múzquiz, en contagiarse de Covid-19, pero mientras los primeros en sufrir la pandemia lograron recuperarse, no así el Padre Sánchez, quien falleció en la ciudad de Piedras Negras el viernes de la semana pasada.
Este hecho lamentable que notifico personalmente el obispo de la Diócesis de Piedras Negras, Alonso Gerardo Garza Treviño, quien también oficio misas en honor del padre Gilberto, en la parroquia del Socorro, en donde prestó sus servicios el hoy occiso.
La presencia de la familia del padre acaecido destacó entre los fieles católicos que asistieron a las distintas ceremonias para despedir al querido párroco, que hasta sus últimos días brindó sus servicios sacerdotales en este municipio de Múzquiz, Coahuila.
Su última obra terrenal, en esta ciudad fue la construcción de la capilla de San Judas Tadeo, en el barrio Los Bosques, hasta donde ayer sus restos también fueron trasladados y donde la comunidad de ese sector, lo despidió bajo una estela de profunda tristeza y llanto.