El ensamble de vehículos en México registró un salto de 8.8% en octubre, comparado con este mismo mes de 2019, en medio de una recuperación acelerada luego de haber marcado prácticamente cero unidades en medio del cierre generalizado de las plantas por la pandemia del Covid-19.
Las empresas ensamblaron durante octubre 347 mil 829 vehículos, unos 28 mil más desde los 319 mil 737 que produjeron en el mismo mes de 2019, resultado de incrementos de doble dígito en el volumen de ocho de los 13 fabricantes que operan plantas en el país, según el reporte mensual de Inegi, publicado el lunes.
De acuerdo con el Inegi, también las exportaciones se vieron beneficiadas de este incremento en la producción, y fueron 8.2% superiores a las reportadas en octubre de 2019, cuando México envió al exterior 259,158 unidades.
General Motors, que en diciembre de 2019 arrancó la producción del sedán Onix en la planta de San Luis Potosí para el mercado latinoamericano, y tiene si camioneta insignia de Coahuila para el mundo, RAM; reportó un incremento de 45% en el volumen de producción de octubre, comparado con el mismo mes del año previo.
Esto ha generado finanzas sanas y seguras, así lo informó la misma compañía mediante un comunicado en días pasadas, lo que da certeza al interior de la industria y sus distintas plantas, entre ellas la instalada en Ramos Arizpe, quien ha apoyado a la reactivación económica de la Región Sureste del Estado.
“Las ventas en Estados Unidos y China se están recuperando más rápido de lo que muchas personas esperaban y GM se está beneficiando de una demanda sólida de los clientes de nuestros nuevos vehículos y servicios, especialmente nuestras pickups y SUVs grandes”, se expresa en el documento dado a conocer hoy, y que cita a John Stapleton, CFO Interino de General Motors. “Estos fundamentos, el impacto positivo de nuestra transformación y las medidas de austeridad, nos están ayudando a reportar ganancias sólidas, generar flujos de efectivo significativos y pagar rápidamente la deuda en la que incurrimos durante los primeros días de la pandemia”, destaca.
Ford, que en octubre de 2019 reportó ‘cero producción’ debido a paros programados, ahora ensambló 1,580 unidades de dos nuevos modelos, el eléctrico Mach-E, en la planta de Cuautitlán, Estado de México, y el todoterreno Bronco Sport en la de Hermosillo, Sonora.
Mazda continúa con la inercia positiva en la producción de su nuevo SUV, CX-30, cuya fabricación arrancó a finales del año pasado en la planta de Salamanca, Guanajuato, reportando una alta demanda, tanto en México como en Estados Unidos. En octubre, la armadora japonesa ensambló 14,920 unidades, el doble de las 7,340 que ensambló el año pasado.
Toyota, que en enero echó a andar una nueva planta en Apaseo El Grande, Guanajuato, reportó un incremento de 15.6% en su producción durante el décimo mes del año.
Mercedes-Benz, que este año arrancó la fabricación del SUV GLB en la planta que opera en un joint-venture con Nissan, reportó un incremento de 41.1% en su producción durante octubre. Por su parte, BMW, que inauguró su planta de San Luis Potosí hace poco más de un año, reportó un incremento de 24.2%, respecto a octubre de 2019, cuando el complejo apenas tenía cuatro meses en operaciones.
Audi ha sumado nuevas versiones del SUV Q5 que fabrica en la planta de Puebla y registró un incremento de 8.9%; mientras que el arranque de la producción de un nuevo SUV en la planta de Volkswagen impulsó 9.4% el volumen alcanzado por el complejo durante octubre.