Varios de sus colegas comenzaron a sospechar de su forma de proceder y ocultaron una cámara para grabarle.
Un anestesista de 32 años ha sido enviado a prisión en Brasil tras ser flagrado abusando sexualmente de una embarazada, mientras le realizaban una cesárea, informa G1.
Los investigadores del caso detallaron que funcionarios del Hospital de la Mujer Heloneida Studart, en Río de Janeiro, escondieron una cámara para filmar a Giovanni Quintella Bezerra.
Según los testimonios, el equipo del que formaba parte Bezerra empezó a desconfiar de la cantidad de sedante que aplicaba en las gestantes y de la manera en la que se movía detrás de la sábana que separaba al anestesista del resto de sus compañeros.
«Tras la salida del acompañante de la sala de cirugía, Giovanni usaba una sábana que impedía que otras personas pudiesen visualizar a la paciente de cuello para arriba», comentó una de las funcionarias.
En la grabación se muestra a Bezerra, a menos de un metro de sus colegas, abusando de la paciente. Al terminar, limpia a la víctima con un pañuelo para ocultar las huellas.
El anestesista ha sido imputado por violación de persona vulnerable, cuya pena puede oscilar entre 8 y 15 años de prisión.
El Consejo Regional de Medicina de Río de Janeiro abrió un proceso para investigar el caso y adoptar las medidas administrativas oportunas.
Por su parte, la Sociedad de Anestesiología de Río de Janeiro denunció que se trata de un «comportamiento completamente absurdo». «Confiamos en que las autoridades competentes investigarán lo ocurrido y sancionarán con todo rigor al médico, si se prueba el delito», sentenció.