El drástico descenso de temperatura que estuvo acompañado por lluvias y viento, golpeó principalmente a personas que habitan en condiciones de vulnerabilidad
Por Wendy Riojas
LA PRENSA
La llegada del frente frío número 8, que provocó una temperatura máxima de 5 grados en la Ciudad, se convirtió en un dolor de cabeza para cientos de familias que viven en condiciones de vulnerabilidad en la colonia Ampliación 21 de marzo.
En este sector la mayoría de las viviendas se encuentran construidas por lámina, cartón, madera y hule; material insuficiente para mitigar las bajas temperaturas que calan hasta los huesos, ya que, se sienten de 3 o 4 grados centígrados menos que en la Zona Centro de la Ciudad.
“Si allá están a 5 grados centígrados acá estamos a 1 grado, pero ¿Qué puede hacer uno?, Las láminas están agujeradas, el agua y/o el aire se me mete por las orillas y todo se pierde. Cada frente frío es igual”.
Así lo mencionó Juan Antonio Reyna de 65 años quien para mitigar la lluvia y las bajas temperaturas prendió unas brazas al interior de su hogar y disfrutaba de un café calientito para aclimatarse.
En la entrevista refiere: “Así la pasamos, con frio. Hay que aguantar, ¿Qué más hacemos? Yo vivo solo y se me han echado a perder cobijas, colchones, ropa, todo, por la lluvia, cada frío y lluvia es un dolor de cabeza”.
En la privada 11 de la Colonia Ampliación 21 de marzo vive la señora Leticia García de la Rosa de 43 años de edad y sus 3 hijos en un jacal construido por madera, lámina y hule, donde se cuela el viento, la lluvia y el frío.
La madre de familia reveló: “Yo cada 7 días me dializo en el Hospital General ‘Amparo Pape de Benavides’ y como puede ver necesito alimentación, ropa abrigadora y una silla de ruedas, la mía esta toda desbaratada, no tiene llantas”.
Y mientras se acurruca en su recámara en compañía de sus 3 hijos de 6, 4 y 1 año de edad, refiere que recibe el apoyo de sus hermanos (de vez en cuando) o bien de su vecina Griselda Yadira Valdez Torres quien le lleva alimento o la saca a pasear.
En la entrevista señala: “Ahorita estamos todos acurrucaditos porque tenemos chorros de frio, pero como ve necesito ropa abrigadora para mi y para mis 3 hijos, solo tengo esta colchita para taparnos los 4”.
Y mientras dormían sin ropa invernal, señaló que requiere ropa en talla M o G y sus hijos en talla 6 o 7 (niño), 5 (niña) y 2 años (niña) así como cobertores, lámina y hule para cubrir el pequeño jacal y así evitar el ingreso de agua y viento.
Los habitantes de este sector admitieron que les pega duro el frío, por la llegada del Frente Frío número 8, y eso que ‘apenas empieza, nos espera más frio, lluvia y viento en noviembre y diciembre’.