Oscar Ballesteros
La Prensa
Más de 5 kilos de peso es lo que una persona regularmente sube como resultado de la ingesta de alimentos tradicionales en las fiestas decembrinas; Josué David Puente Juárez, nutriólogo y entrenador personal, señaló que en las comidas típicas de esta temporada predominan los carbohidratos simples y grasas trans, características que influyen directamente en el aumento de peso.
En un lapso máximo de 3 semanas correspondientes a las fiestas navideñas y de Año Nuevo es que se da este incremento en el consumo de alimentos, siendo los platillos tradicionales: tamales, pavo, carnes rojas asadas, pierna de cerdo, además de otros complementos que corresponden a preparaciones altas en grasas no saludables y carbohidratos.
“Predominan los carbohidratos simples que son altos en azúcar y grasas trans, que no las eliminamos ni con el ejercicio, ese tipo de alimentos son los que afectan mucho en la subida de peso y llámese a un futuro no tan lejano, porque ya tenemos un mal hábito de alimentación, podamos tener una enfermedad temprana” compartió el licenciado en nutrición.
El mayor riesgo de la alta ingesta de este tipo de comidas es desarrollar enfermedades como sobrepesos, obesidad o diabetes; de estas México tiene un panorama muy negativo, puesto que es segundo lugar mundial en sobrepeso y sexto en diabetes, a la vez de ser segundo en América Latina, precisó Puente Juárez.
Los menores suelen los de mayor afectación, el país ocupa el primer lugar en sobrepeso y obesidad infantil y esto se debe a la imitación de las mismas prácticas alimenticias de los adultos, además de sumar la ingesta de dulces durante esta época, lo que los hace más propensos a desarrollar enfermedades de esta índole.
“Para los niños, en México ocupamos el primer lugar en sobrepeso y obesidad infantil debido a una mala alimentación, los niños siempre están enfocados a sus padres y la nutrición aquí está muy mala y eso puede perjudicar a los infantes, al ver que sus papás, tíos, amigos no se alimentan bien, van a tomar esos malos hábitos también” señaló el nutriólogo.
Finalmente, Josué Puente resaltó la importancia de seguir las nuevas disposiciones del Plato del Buen Comer sobre todo durante los primeros días del año, para lograr equilibrar los hábitos alimenticios, junto a mantenerse hidratados y aumentar la actividad física hasta al menos 4 días a la semana.
“Hay que seguir el Plato del Buen Comer, incluir las frutas de temporada y verduras en un 50 por ciento del plato, grasas esenciales en aceites como aguacate, alimentos de origen animal sobre todo carnes blancas, leguminosas en 15 por ciento, y el resto cereales y tubérculos (…) mantenerse bien hidratados y la actividad física hay que aumentarla, mínimo 4 días de ejercicios” concluyó.
