Por Exélsior
La Prensa
En la provincia de Formosa, Argentina, Ariel Lovey asesinó a su hijo de 8 años, Zamir, quien padecía discapacidad motriz y, por lo tanto, no podría tener una vida “normal”. El hombre confesó el crimen a través de un video y procedió a suicidarse.
El episodio tuvo lugar en la casa de la familia, donde Lovey contó su crimen a través de un corto explicando sus acciones y se justificó asegurando que le ahorraba una vida de sufrimiento a su hijo.
Yo creo esta es la mejor alternativa. Por qué si no (sería) mucho sufrimiento… tantos años”, dijo el padre del niño.
Después de grabar el mensaje, Lovey intentó suicidarse disparándose en la cara con una escopeta. Aunque sobrevivió inicialmente, falleció horas después en el Hospital Central provincial debido a las graves heridas.
Zamir nunca lograría ser alguien normal”, sentenció el hombre antes de quitarse la vida.
Discapacidad motriz
El niño de ocho años padecía una discapacidad motriz a causa de su nacimiento prematuro. Los médicos habían confirmado que la afección no podía curarse.
La comunidad local y diversos grupos expresaron su pesar por la tragedia, recordando a Zamir como un niño radiante que dejó una profunda huella en quienes lo conocieron.
Les pido un millón de disculpas”, dijo el padre de Zamir.
En las redes sociales, la indignación y el rechazo hacia Lovey fueron evidentes, con mensajes que reflejaban la falta de comprensión y condenaban enérgicamente sus acciones.
Algunos usuarios comentaron:
Eres, no lo dudes, un monstruo.
Que bueno que el pequeño niño ya está lejos de ti y en un lugar mejor.
Procrear nunca convertirá en padre a sujetos como tú.
Te falto valor, cariño y decencia.
Las autoridades de Argentina no se han pronunciado oficialmente respecto al caso.
