Claudia Guerrero y Martha Martínez
Agencia Reforma
CIUDAD DE MÉXICO 23-Sep-2024 .-El Presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que los manifestantes que le gritaron «dictador» y le lanzaron una botella el pasado domingo en el puerto de Veracruz, lo hicieron porque están enojados con la transformación impulsada por su Gobierno.
En su mañanera, el Jefe del Ejecutivo presumió la habilidad que tuvo para esquivar el objeto que le fue arrojado durante una protesta del Poder Judicial, justo cuando llegaba a la inauguración la Casa Benito Juárez.
«Me tiraron una botella de agua y. pues es que yo empecé jugando béisbol, era filder, imagínense si no sé. Si hasta la pude haber agarrado y. Pero no pasó a mayores. Entiendo que están enojados, están molestos. Por esto mismo, ellos quisieran que no cambiara nada.
«Les molesta mucho a los que se equivocaron, no quieren aceptar su error. Aunque es de sabios cambiar de opinión, no quieren rectificar, se quedan en la autocomplacencia, quisieran decir o poder gritar a los cuatro vientos que somos iguales».
El domingo, el Mandatario federal fue recibido entre gritos de «¡dictador, dictador!» por parte del personal del Poder Judicial de la Federación en Veracruz.
Al momento en que ingresaba a la Casa Juárez, alcanzó a esquivar una botella de agua que fue lanzada desde la acera donde protestaban los trabajadores inconformes.
Ayer, en Palacio Nacional, López Obrador dijo que no habrá persecución ni castigo contra el responsable de haber arrojado la botella.
«Les molesta mucho el que no haya corrupción y otra cosa que les molesta mucho es que no haya represión, por ejemplo, al que tiró la botella ayer, ese puede estar tranquilo. Y yo soy partidario de que no haya castigo», señaló.
El titular del Ejecutivo federal pidió a sus simpatizantes actuar con prudencia y no caer en provocaciones.
- ¿Considera que fue una agresión en su contra?
- «No (considero lo de ayer como una agresión), porque no pasó a mayores. Y yo también pido que actuemos con mucho respeto, que los que están participando en la transformación del País, que actuemos con respeto, con tolerancia.
«El triunfo de la reacción es moralmente imposible. Entonces, por eso hay que actuar con mucha prudencia, no caer en ninguna provocación», agregó.
El Presidente sostuvo que los trabajadores del Poder Judicial han sido engañados sobre las repercusiones que tendrá la reforma constitucional, que obligará a los jueces, magistrados y ministros, a ser votados en las urnas.