Tilda Swinton y Julianne Moore protagonizan el primer filme en inglés de Pedro Almodóvar que habla de la decisión de partir cuando el dolor no es soportable y la vida se ha reducido a lo mínimo de sí misma
Para hablar de la eutanasia, dice Pedro Almodóvar, hay que acercarse desde la humanidad y abordarla sin una visión teológica.
En su nueva cinta La habitación de al lado, el realizador manchego aborda la muerte no desde una visión lúgubre, sino que refleja la vitalidad de su personaje central: Martha, una mujer con cáncer terminal que decide que la vida ya no es opción. Para ello, Martha le pide a una vieja amiga, Ingrid, que la acompañe en este proceso en espera de la muerte.
Protagonizada por Tilda Swinton (Martha) y Julianne Moore (Ingrid), la película está llena de colores “rojos como lo hizo (Ingmar) Bergman en Gritos y susurros (1972).
Quería hacer una película luminosa y casi optimista en el sentido de que la muerte ocurre, pero la ha decidido la persona que va a morir y esto supone una gran lección para el personaje de Julianne Moore, que cambia a lo largo de la cinta con respecto a su idea de la mortalidad. Aprende de Martha el cómo disfrutar de cada momento del día aunque sea en una circunstancia como la que viven”, explica Almodóvar en una rueda de prensa virtual con medios de comunicación internacionales.
Durante la casi hora de conversación, el escritor mezcla los nombres de sus personajes y actrices como si se hubieran mimetizado. No importa quién es quién, Swinton y Moore son, desde ahora, chicas Almodóvar.
En La habitación de al lado, que hoy se estrena, la muerte es tratada con dignidad, elegancia y respeto. El director subraya a Excélsior la cultura que “vosotros tenéis sobre la muerte es muy barroca y muy espectacular, en efecto.”
Pero también reconoce que, por definición, la eutanasia atenta contra la idea de dios. Entonces, “todos los credos, desde el católico a todos los demás, tienen un enorme problema para enfrentarse al hecho de la eutanasia, porque para ellos, dios es el que da la vida y es el único que puede quitarla”, comenta retomando el discurso que dio al ganar el León de Oro en la pasada edición del Festival de Cine de Venecia.
Pidió, en aquel momento, que las personas que tienen un credo que no admite la eutanasia respeten las decisiones individuales de los que o son ateos o simplemente deciden por su vida de un modo totalmente individual.
No es ni una cuestión política, es una cuestión humana, pero se convierte en un tema político desde el momento en que la ultraderecha está en contra de la eutanasia y ampliando este negacionismo”, agrega.
En el filme, uno de los personajes, Damian, a quien da vida el actor John Turturro, alerta sobre la unión del neoliberalismo y la ultraderecha, algo que Almodóvar dice que sucede en el mundo, pero especialmente en Estados Unidos.
El español habló previo a las elecciones en la Unión Americana y señaló “el momento en el que el neoliberalismo, feroz, salvaje, ése sistema que rige en Estados Unidos, vaya de la mano de la ultraderecha, es una mala noticia para todos. Los dos son negacionistas, significa que no van a tomar las decisiones adecuadas para tratar de salvar nuestro planeta y lo cual supone un enorme peligro; ultraderecha más neoliberalismo es uno de los grandes peligros que ahora mismo hay en Estados Unidos”, enfatiza.
DECISIÓN PROPIA
Almodóvar hace énfasis en que el ser humano sea dueño de su vida y que, como un signo de vitalidad, pueda decidir también acerca de su muerte cuando la vida no le propone nada, “excepto un dolor insoportable.”
Uno de los procesos que vive Ingrid es al tener tan cerca la muerte de su amiga, yo creo que ella termina accediendo a entender que la muerte si es algo que lo ha decidido el propio individuo, para ella es mucho más entendible y aceptable que de otro modo.
Martha está criticando justamente a la gente que piensa así (sobre ‘rendirse’), no significa que no sea luchadora, al contrario, pero su lucha contra el cáncer también es personal y su modo de luchar es como dice en la película ‘llegar antes que llegue el cáncer’. Yo creo que todos los enfermos luchan hasta donde pueden, pero es un tópico, yo creo que muy cristiano, pensar que si sobrevives eres un héroe, pero si no, eres lo contrario. Ese tipo de ética es con la que ella reacciona a la contra, porque no es cierto”, subraya el realizador.
“ESPERO QUE NO SUFRA”
Retratar la eutanasia y la manera en que Martha decide no querer seguir puede resultar, quizá, un poco doloroso para el espectador, pero Almodóvar espera que éste “no sufra demasiado viéndola.”
En efecto la película es acerca del dolor y de cómo reacciona un personaje a su propio dolor, en este caso, producido por un cáncer”, desarrolla, “pero yo quiero creer que justamente la película también cuenta como esa especie de apocalipsis personal. El personaje de Tilda es capaz de disfrutar de las cosas, de disfrutar de la nieve, cuando en el hospital recita las palabras de James Joyce (autor del relato The Dead), en efecto es muy doloroso cuando habla de que se ha reducido a lo mínimo de sí misma, se ha reducido a la mera supervivencia, porque el resto de las experiencias: leer, la música, escribir, han perdido la magia que tenían antes.
Tilda está maravillosa en esa secuencia y es muy doloroso oirle decir eso, en efecto, pero he tratado de iluminar la película con momentos más optimistas”, explica.
CON SUS PROPIOS TÉRMINOS
Luego de los cortometrajes La voz humana (2020), protagonizado por Tilda Swinton, y Extraña forma de vida, La habitación de al lado es su primera cinta en inglés.
Al respecto, Almodóvar comenta que se rehusaba a trabajar en este idioma desde hace tiempo porque no le “gustan las maneras de producción en Hollywood”, así que pensó que si lo necesitara, escribiría algo para ser filmado en inglés porque los personajes, en este caso, viven en Nueva York, “pensaba hacerlo en mis propios términos, es una cuestión de poder. (Fue) encontrar personajes que me inspiraran que vivieran en otro lado fuera de España”.
Sin embargo, para dirigirse a las actrices, cuenta que, “como dijo Tilda”, lo suyo es el idioma cinematográfico y ése es un idioma universal “en el que nos entendemos muy bien, y es verdad.
Respecto a Tilda, tenemos gustos muy parecidos en cuanto a literatura, cine, ya había descubierto eso en La voz humana, tuve una química inmediata con ella; la lengua, que podría ser un problema, dejó de serlo.
Con Julianne, que es americana, no he tenido problema para relacionarme, le he dado las indicaciones que necesitaba, pero Julianne sí me ha corregido en algún momento alguna línea del guion proponiéndome un modo mejor de decirlo en Estados Unidos o en Nueva York, y eso suponía un pequeño problema para mí, pero decidí fiarme de ella y cuando me lo indicó, que fue como tres o cuatro veces, cambié la línea del diálogo, porque no puedo competir con ella en el lenguaje”.
¿VISIÓN QUEER?
Conforme se desarrolla la cinta, la relación entre Martha e Ingrid se vuelve de una intimidad extrema y que podría haberse convertido en amor.
La película habla del acompañar, de estar al lado, aunque sea en silencio y en ocasiones como ésta, es lo mejor que se puede hacer por una persona.
Siento que, durante la escritura, tuve la sensación de hacerlas amantes como el final de su relación, pero decidí que no fuera así, justamente me parecía más original que no fuera así, pero en efecto es una relación romántica que, creo, como dice Tilda, no se puede querer más a alguien de lo que quiere Julianne a Tilda al final de la película.
He preferido cambiarlo, como ocurre en Persona, de (Ingmar) Bergman, en una manera de casi se reencarna en Julianne… hay una especie de transferencia de un personaje a otro y cuando al final Julianne se enfrenta al policía, se enfrenta con una bravura que le pertenece más a Martha que a ella, ha habido una especie de transferencia entre las dos personalidades”, concluye.
EL DESARROLLO
La habitación de al lado está basada en la novela What Are You Going Through (2020), de la escritora estadunidense Sigrid Nunez.
El realizador escribió el guion y después conoció a Nunez. Lo hizo con absoluta libertad, como la manera en que siempre adapta una obra.
Lo que más le interesaba cinematográficamente, explica, era la visita de una mujer enferma y la proposición que ésta le hace a su amiga.
Empecé a escribir sobre estos dos temas y después ya seguí. No volví a leer el libro y seguí escribiendo de acuerdo con la propia historia que yo estaba recibiendo, lo que el propio guion me pedía.
Para mí, la novela es el origen, pero lo desarrollo y lo convierto en algo mío. No soy un adaptador fiel como lo he hecho en cine. Para mí siempre, lo importante, es convertir algo mío en lo que viene de fuera y para mí esta historia era muy importante según la iba desarrollando, esa especie de identificación que hay al final de Ingrid con Martha, que es casi como una especie de transferencia de un personaje a otro; Ingrid recibe el legado que le ha dado Martha y ése legado forma parte de este nuevo carácter mucho más fuerte de Ingrid que el que tiene al principio.”
Tómalo en cuenta: La nieve, al final de la cinta, representa para el director una especie de reencarnación.
Objetos propios: Como en muchas de sus obras, en ésta aparecen artículos suyos.
En una escena, aparece una imagen de “ocho viudas en Georgia” vestidas de negro y con velos negros o un cuadro con flores inacabadas del artista español Antonio López.
Ingrid: El nombre de Ingrid (Julianne Moore) se basa en la actriz Ingrid Bergman. También se muestra un póster de la cinta Viaggio in Italia, protagonizado por Bergman, y dirigida por Roberto Rossellini.
También es tener presente a la actriz Ingrid Thulin, quien trabajó con Ingmar Bergman.