Con finalidad de fomentar valores y consolidar el tejido social
Los ediles de la región Centro-Desierto se unen en la reunión con el obispo Hilario Gonzales y el secretario de gobierno, Oscar Pimentel, para impulsar la colaboración y fortalecer la paz en sus comunidades
Luis Ángel Estrada
La Prensa
Cuatro Ciénegas, Coahuila. – En este Pueblo Mágico se llevó a cabo la reunión titulada “Diálogos por la Paz, región Centro-Desierto”, encabezada por el obispo de la Diócesis de Saltillo, Hilario González, quien estuvo acompañado por Óscar Pimentel, secretario de Gobierno; Sergio Sisbeles, subsecretario de Gobierno, así como por los alcaldes de la región.
Durante su intervención, el obispo destacó el papel fundamental de la Iglesia en el fomento espiritual y la promoción de la armonía social. Señaló que el cumplimiento del apostolado incluye contribuir al bienestar de las comunidades, por lo que subrayó la importancia de trabajar de manera coordinada con los tres niveles de gobierno.
Mientras que, el secretario de Gobierno, Óscar Pimentel, enfatizó que esta iniciativa forma parte de los compromisos del gobernador Manolo Jiménez Salinas, especialmente en cuanto a alinear las prioridades gubernamentales con las necesidades de la ciudadanía. Además, anunció que se fortalecerá la colaboración con la Iglesia Católica para promover valores y consolidar el tejido social, elementos esenciales para garantizar un entorno de paz. También mencionó que este modelo ya se implementó con éxito en la región Sureste, lo que representa una referencia para su aplicación en otras zonas del estado.
El alcalde de Monclova, Carlos Villarreal, dio la bienvenida a los asistentes y reiteró el compromiso de los alcaldes de la región con sus comunidades. Subrayó que trabajarán de manera conjunta para garantizar el éxito del programa.
El proyecto incluye actividades enfocadas en la resolución de conflictos, el fortalecimiento de valores y la mejora de espacios públicos, con el objetivo de construir comunidades más fuertes y cohesionadas. Tanto las autoridades municipales como eclesiásticas coincidieron en que el diálogo, la paz y la cooperación son pilares fundamentales para alcanzar estos objetivos.
Con este esfuerzo conjunto, se busca crear un modelo replicable en todo el estado, garantizando el bienestar social y un entorno de armonía para las comunidades de la región Centro-Desierto.