El conflicto entre productores rurales y el Gobierno Federal en Guanajuato, derivó en el cierre carretero que afecta la cadena de suministro de la industria automotriz, afectando la planta de Ramos Arizpe, con 6 mil 500 trabajadores
La Prensa
RAMOS ARIZPE, COAHUILA.– Los bloqueos carreteros protagonizados por productores rurales en Guanajuato provocaron la suspensión temporal de operaciones en las plantas de General Motors ubicadas en Silao, San Luis Potosí y Ramos Arizpe, donde se aplicará un paro técnico de seis días.
El área de Relaciones Públicas de la automotriz confirmó que el Complejo Ramos Arizpe detendrá actividades a partir del jueves 30 de octubre, con reanudación programada para el martes 4 de noviembre, debido a las afectaciones en la cadena de suministro y distribución derivadas de los bloqueos.
En un comunicado, la empresa señaló que mantiene comunicación constante con autoridades estatales, federales y sindicatos, y que continúa evaluando alternativas para mitigar los impactos, priorizando la seguridad y bienestar de sus empleados.
Por su parte, Tereso Medina Ramírez, dirigente estatal de la CTM, informó que los trabajadores recibirán el 75% de su salario durante el paro técnico, y destacó que la situación es ajena a la industria automotriz, aunque afecta directamente a 17 mil trabajadores de las tres plantas, de los cuales 6 mil 500 laboran en Ramos Arizpe.
“Falta medir el impacto en la industria de autopartes, porque también hay afectación. No olvidemos que por cada empleo en la industria automotriz hay ocho en la cadena de proveedores, y esta protesta también les repercute, ya que se trabaja bajo el esquema de Just in Time”, señaló el dirigente.
Medina Ramírez exhortó a privilegiar la estabilidad laboral y mantener acuerdos entre empresa y sindicato para garantizar condiciones justas mientras dure la suspensión.
El paro técnico, dijo, es una medida temporal mientras se restablece el flujo logístico en la zona del Bajío, una de las más importantes para la industria automotriz nacional.