La falta de inventario de vehículos nuevos en agencias, derivado de la escasez de chips y el aumento en los precios, son razones que han empujado el financiamiento de los autos seminuevos, al grado de que en 2021 se registró el mayor volumen desde 2014, año a partir del cual se tienen registros.
Durante 2021 se financiaron 120 mil 466 unidades seminuevas, 10 por ciento más que en 2019, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Asimismo, las unidades usadas representaron el 16.7 por ciento del total del financiamiento otorgado en México en 2021, cuando en el 2019 la participación era de 12 por ciento.
Pese a la pandemia, el mercado de vehículos seminuevos ha avanzado en sus solicitudes de crédito y poco a poco va desplazando a los nuevos.
La escasez de chips a nivel mundial ha provocado que las empresas automotrices detengan sus líneas de producción de manera momentánea, lo que a su vez ha reducido las entregas en las agencias y los autos usados han ganado terreno, refirió David Placencia, presidente de la Asociación Nacional de Comerciantes en Automóviles y Camiones Nuevos y Usados (ANCA).
“Los vehículos nuevos están muy escasos por los chips, entonces hay que esperar mucho tiempo para que lleguen, por lo que el vehículo seminuevo y sobre todo el de años más recientes, se está desplazando mucho”, afirmó Placencia.
Es el caso de autos muy demandados en el mercado como Versa, March o Spark, de las marcas Nissan y GM, los cuales aumentaron alrededor de un 20 por ciento respecto a 2019, previo a la pandemia, aseguró.
Anteriormente el tiempo de espera de un comprador era menor a 20 días, pero ahora requieren en promedio 49, según Francisco Bautista, socio líder del segmento de Manufactura Avanza y Movilidad de EY Latinoamérica Norte.
Otro factor que impulsó el aumento del financiamiento de los seminuevos es el precio, ya que el consumidor mexicano es muy sensible a este tema, expuso Alberto Torrijos, socio líder de la Industria Automotriz en Deloitte Spanish Latin America.
“Somos un País muy sensible al costo y precio, entonces la oferta de seminuevos tiene una ventaja de que tienen precios mucho menores”, destacó.
Las personas también se acercan a los seminuevos porque cada vez hay más plataformas digitales que ofrecen seguridad en la compra e integran los planes de financiamiento en línea, añadió Torrijos.
Ante este escenario, se espera que a lo largo del año el financiamiento de las unidades seminuevas siga ganando terreno frente al de las nuevas.
Al cierre de este año, y de mejorar el suministro de chips, se podría ver una recuperación para el mercado de los autos nuevos, lo cual tomaría más fuerza en 2023, consideró Placencia.
Para atraer un mayor financiamiento de vehículos nuevos se requiere entender mejor al cliente y sus preferencias, y a partir de ahí establecer programas de financiamiento más flexibles, es decir, que a partir de las situaciones que se vayan dando en el País el esquema pueda ir teniendo cambios, comentó Torrijos.
