Una historia realmente bizarra en el deporte profesional.
El quarterback de los Cargadores, Tyrod Taylor, no habría jugado en la Semana 2 de la temporada de la NFL porque el doctor del equipo le perforó el pulmón accidentalmente al inyectarle una sustancia para el dolor, revelaron medios de Estados Unidos.
Taylor recibió el medicamento previo al juego ante los Jefes de Kansas City para ayudarle por un dolor en las costillas, pero durante el procedimiento ocurrió el accidente y el jugador tenía problemas para respirar.
Fue reemplazado por Justin Herbert, quien terminó con 311 yardas, una anotació y una intercepción en la derrota 23-20 ante el campeón.
El coach del equipo, Anthony Lynn, no quiso comentar a fondo y sólo indicó que hubo complicaciones durante el procedimiento de su mariscal de campo, agregando que éste se mantendrá como el titular cuando se recupere.
La Asociación de Jugadores de la NFL investiga el accidente.