Por Gloria Jaramillo
Un escándalo por violencia familiar envuelve al doctor Salvador Orozco, recién nombrado Secretario General de la sección local del Sindicato del IMSS, a raíz de la golpiza denunciada por su ex esposa, la también médico Melly Baez, motivo por el cual el dirigente de trabajadores del IMSS se encuentra privado de su libertad en las celdas del Centro de Justicia y Empoderamiento para la Mujer.
Estos hechos ocurrieron el pasado martes 26 de Julio, alrededor de las 2:30 de la tarde en el domicilio habitado por la ex esposa y los 3 hijos pequeños del doctor, a pesar de que él ya se encontraba en horario laboral en la Clínica 7 del IMSS, afirmó la denunciante.
Después de dos meses era la primera vez que el doctor acudía al domicilio ubicado en la colonia San José, pues acababa de vencer la restricción que le había impuesto la autoridad, precisamente por antecedentes de violencia en contra de la madre de sus hijos.
“Se había comportado cortésmente y yo lo dejé entrar y ya se había terminado la orden de protección que me habían otorgado por violencia psicológica y física”, explicó Melly Baez quien actualmente es médico familiar en la Clínica 7 del IMSS. Ella mostró moretones en rostro y cuerpo a raíz del episodio violento.
“Lo dejé pasar, él llegó muy contento, los niños grandes no desearon verlo porque los había insultado, había utilizado palabras de imbécil, de estúpidos, mentirosos y tontos y ellos no quisieron verlo”, explicó.
Sus hijos mayores, de 10 y 9 años no quisieron verlo, únicamente el menor de 4 años, y él se enojó y reclamó que ella no le permitía ver a los niños, por lo cual ella le insistió a sus hijos mayores para que bajaran a ver a su papá.
El niño de 4 años es el único que salió a recibirlo, les llevaba unos regalos de Eagle Pass, el había ido el fin de semana y llevaba 3 mochilas y un balón, y él reclamó que ella no le dejaba verlos y en cambio sí había recibido recién 30 mil pesos del mes de julio.
“Le aclaré que yo no había recibido nada, a lo que responde que seguramente mis abogados se están quedando con el dinero”.
“Yo le aclaro que la pensión me llega a mí y ese dinero lo utilizo en los niños, y tengo como comprobarlo con notas, con facturas, y desde el primer momento que se paga la pensión, que él tanto niega y quiere revocar, yo he comprobado todos los gastos que hago para mis hijos y hasta me sale debiendo”, agregó.
Menciona que aunque no tiene la obligación de comprobarlo, por ser justa llevó esa información eso ante el Juez, y posteriormente él se exaltó y dijo que estaba manteniendo a unos niños que ni siquiera lo quieren ver.
“Entonces yo llamé a mis hijos para que bajaran a ver a su papá, pero ellos no bajaron, entonces él se acerca a la puerta en un lugar estratégico donde sabe que las cámaras de la casa no alcanzan a grabar, empezamos a discutir, yo le recordé que son sus hijos y que tienen el derecho de recibir y él de pagar una pensión, pero él fuera de sí me empezó a golpear”.
El le lanzó un puñetazo, y para entonces ya la mamá de Melly había corrido y vio cuando la golpeó en la mandíbula inferior derecha, “recibí golpes y rasguños en el tórax, traigo moretones en el brazo y un esguince en la muñeca derecha”.
“El primero fue un puñetazo porque él sabe boxear, en eso baja el niño grande y se da cuenta que él me había golpeado, entonces el niño de 10 años le da un golpe en el abdomen para defenderme y le dijo, no le pegues a mi mamá”.
En eso viene el papá de ella, los separa y los trata de tranquilizar porque él no la soltaba, ella tampoco porque temía que la volviera a golpear en la cara.
“Le dije que se fuera, que lo iba a denunciar porque me había golpeado, en eso llamamos a la patrulla rosa, llamamos al 911, mi hijo el de 10 años trataba de tranquilizar a Salvador, me tranquilizaba a mí también porque yo si le reclamaba que me hubiera golpeado y todo por una pensión que le corresponde dar por Ley”.
Posteriormente los vecinos que se habían dado cuenta salieron, ella le grité a un vecino que le llamara al 911 porque Salvador la acababa de golpear.
Los vecinos salieron, pero el doctor Salvador Orozco Torres gritaba, ¡me están golpeando! , ¡me están golpeando!
Ella afirmó que tiene3 videos en donde se muestra que no lo tocaron pero él se hacía la víctima.
“El volteó las cosas, y yo empecé a grabar cuando decía me están golpeando, una total mentira, y ya mis vecinos acudieron como testigos para decir que en ningún momento nosotros lo agredimos, al contrario, yo fui la agredida”.
TIENE ANTECEDENTES DE VIOLENCIA FAMILIAR
Explicó que el doctor Salvador tiene un antecedente por violencia familiar, pues ya le había pegado con un palo de escoba meses atrás.
Pero el motivo de la separación fue por infidelidad de él, aclara su ex esposa.
Antes hubo agresiones físicas, verbales, psicológicas y económicas.
Ella desde el matrimonio, se ha dedicado a la consulta familiar en el IMSS y a cuidar a sus tres hijos, además de las tareas de la casa.
El doctor es anestesiólogo, se dedica a trabajar en la mañana, en la tarde, sábados y domingos en el hospital Amparo Pape, y de allí sus hijos no han recibido pensión y de su práctica privada tampoco, sólo la que corresponde al IMSS y a la Clínica del Magisterio.
“Había órdenes de restricción, él me perseguía, si yo iba al tae kwon do con los niños él me perseguía, si yo iba a natación allí estaba presente, yo le recordaba que tenía orden de restricción y él me decía que quería ver a los niños, y entonces yo le recordaba que si los podía verlos pero me tenía que avisar a qué hora, para que mi mamá que es la encargada que quedó ante el Centro de Empoderamiento se los entregare informara a qué hora los iba a entregar”.
Explicó que sus hijos ya habían presenciado estas formas de maltrato, incluso cuando él la golpeó en la espalda con un palo de escoba.
SIGUE EN LAS CELDAS DEL CJEM
La abogada de la doctora Melly, Arely Mendoza explicó que al doctor Salvador Orozco se le llevó inicialmente la patrulla rosa, y entonces los oficiales detectan los moretones y lesiones que tenía la doctora a partir de los golpes que acababa de recibir y lo consignan ante la Agencia del Ministerio Público y de allí al Centro de Justicia y Empoderamiento para la Mujer que decide asegurarlo en sus celdas.
“La denuncia ya está formalizada, el señor Salvador se encuentra detenido porque se va a formular la imputación próximamente”, indicó la abogada..
Añadió que el Ministerio Público es el encargado de recabar todos los datos de prueba para que él pueda ser llevado ante el Juez, y ya ante el Juez se va a formular la imputación correspondiente para que se acredite el delito que cometió.
Y mientras tanto él va a seguir detenido hasta que el Juez decida si va a seguir en libertad,.
El delito que se le imputa es violencia intrafamiliar y por las lesiones que le provocó a la doctora Melly.
MATRIMONIO FINALIZA POR INFIDELIDAD
“Él se fue de casa el 27 de marzo, era un domingo en la noche, me dijo que yo no tenía la culpa, que yo era muy bonita, muy trabajadora, pero que él deseaba otra vida y yo acepté, me explicó que él tenía a otra persona que le pedía el divorcio para poder estar con ella, me dolió mucho porque yo sì lo quería, éramos una familia y un matrimonio feliz aparentemente, porque luego me di cuenta que yo presentaba violencia psicológica”, expresó Melly.
Explicó que el doctor la manipulaba con sus ingresos, le pedía cantidades fuertes de dinero, 30 o 50 mil pesos porque él siempre mantuvo la casa, sin embargo cada dos o tres meses le pedía dinero porque ya no hallaba como pagar alguna tarjeta.
“Cuando yo no acepto un acuerdo de convenio, que era un convenio que no era nada favorable para los niños en que me pedía renunciar a la pensión, y a partir de las dos semanas que sale de casa comenzó con esas agresiones, con perseguirme, con amenazarme, que me iba a quitar la casa, la camioneta, que me iba a quitar todo lo que tenía y me iba a dejar en la calle, que yo era una simple médico familiar pobretona, que él ganaba mucho dinero y que por eso él Juez le iba a dar a los niños”, manifestó.
Afirmó que por el dolor de ver concluido su matrimonio a causa de una deslealtad, ella se vio en la necesidad de acudir a terapia con psicóloga, al igual que sus hijos.
“Yo siempre quise que él llevar buena relación con mis hijos, yo les quiero enseñar a querer a su papá, igual el psicólogo”, mencionó, sin embargo sus hijos no han podido superar el maltrato hacia su madre y hacia ellos mismos, concluyó.
